La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, llamó a romper el pacto de silencio de los represores en torno de las violaciones a los derechos humanos cometidos en dictadura y pidió que colaboren con la Justicia, como hizo un ex recluta en el Caso Quemados, donde los militares rociaron con nafta e incendiaron a dos manifestantes en 1986. “Hay personas que saben la verdad de muchos casos que permanecen sin resolver y les pido que sigan el ejemplo del conscripto (recluta) Fernando Guzmán y ayuden a reparar tanto dolor”, dijo Bachelet.