El incendio de pastizales en islas de Entre Ríos, que ocupó cinco kilómetros de extensión, cubrió de humo y cenizas la ciudad de Rosario y provocó inconvenientes respiratorios y oculares a sus vecinos. Pero además desató una fuerte polémica entre autoridades de las dos provincias. Ayer a la tarde, según funcionarios del gobierno entrerriano, el fuego generado a raíz de la quema de pastizales en las islas ubicadas frente a la ciudad santafesina estaba fuera de control. Al respecto, Fabián Daydé, titular de Defensa Civil de Victoria, Entre Ríos, informó que “en algunos lugares de las islas, lo que era una quema de pastizales se transformó en incendio”. Por su parte, el secretario de Medio Ambiente de Santa Fe, César Mackler, reconoció que “no- sotros nos encontramos impedidos de actuar porque se trata de otro territorio, si bien hemos realizado numerosas gestiones para tratar de solucionar este grave problema”. En tanto, el intendente de Rosario, Miguel Lifschitz, denunció “una falta de interés absoluta y muy llamativa” por parte del gobierno entrerriano. “No hay siquiera la más mínima acción, la más mínima intención” de detener el fuego, consideró, al tiempo que convocó a una movilización mañana en la cabecera del puente que une Rosario con Victoria, para protestar por los constantes incendios de pastizales en islas de la región. Por su parte, Mackler consideró que, al estar la quema de pastizales “relacionada con la ganadería, actividad que le da mucho dinero a la provincia de Entre Ríos, la causa principal está muy lejos de resolverse”. El funcionario también reiteró el pedido al gobierno nacional –responsable del Plan Nacional del Manejo del Fuego– por una brigada constante para combatir los casos de incendios, por el que, aseguró, “no hemos recibido respuestas”.