SOCIEDAD
› EE.UU. INVESTIGARA LA SUPUESTA CLONACION HUMANA
Todos los ojos sobre el clon
Las autoridades norteamericanas anunciaron que investigarán a Clonaid para conocer cómo fue la supuesta clonación humana. Los raelianos anunciaron que hoy podrían empezar las pruebas de ADN.
Por Rosa Townsend *
Desde Miami
Las autoridades sanitarias de Estados Unidos anunciaron que abrirán una investigación a la empresa Clonaid para averiguar las circunstancias en las que asegura haber llevado a cabo una clonación humana y comprobar si ha violado las leyes norteamericanas. Si se comprueba que es cierta la clonación hecha pública el pasado viernes en Miami por la secta de los raelianos, se habrá violado la legislación del país, según señalaron fuentes judiciales. Al mismo tiempo, voceros de Clonaid dijeron que la beba nacida la semana pasada estaba volviendo “a casa” ayer y que hoy mismo se podrían iniciar las pruebas de ADN para comprobar que es un clon de su madre. Los resultados, agregaron, podrían estar en una semana. Pero el secreto de la identidad se mantiene: la científica Brigitte Boisselier no quiso detallar dónde es “casa” para la recién nacida, dónde tendrán lugar esas pruebas ni quién las hará, lo que no hace sino aumentar el escepticismo en los ámbitos científicos.
En EE.UU. no existen leyes que prohíban específicamente la clonación humana, pero la FDA (la agencia de control de medicamentos estadounidense) debe aprobar todos los experimentos. En enero, la Academia Nacional de las Ciencias de EE.UU. recomendó que se prohibiera totalmente la clonación de seres humanos, incluso la terapéutica, pero sólo cuatro estados lo han hecho (California, Michigan, Louisiana y Rhode Island). Bajo la normativa vigente, la FDA tiene jurisdicción sobre este tipo de experimentos al amparo de la Ley de Salud Pública, Alimentos, Fármacos y Cosméticos.
Boisselier, directora de la empresa Clonaid y obispo de la secta raeliana, aseguró que el bebé clonado se encuentra perfectamente. Los raelianos aseguran que el clon es una niña llamada Eva, que pesó 3,2 kilos al nacer, y que la madre es una norteamericana de 31 años casada con un hombre estéril.
El líder de los raelianos, el ex periodista Claude Vorilhon, que cambió su nombre por Rael, afirmó ayer en televisión que la clonación de Eva es “sólo el primer paso hacia la inmortalidad”. “Mi meta última es infundir vida eterna a la humanidad a través de la clonación”, dijo en el programa “Newsnight”. Respecto a las implicaciones morales de la clonación, dijo: “Crear vida no me plantea problemas éticos”.
Ante el escepticismo de la comunidad científica internacional, Rael y Boisselier insistieron en que en una semana aportarán pruebas de que la clonación del bebé es real. Los raelianos afirman que hay un grupo de científicos independientes elegidos por el periodista y médico Michael Guillen para verificar la clonación.
La presidenta de la Sociedad Médica Reproductiva de EE.UU., Sandra Carson, ha afirmado que es imposible creer en esta clonación cuando no se han presentado pruebas científicas que la fundamenten ni el proceso ha estado sujeto al mínimo seguimiento científico de medios independientes.
Carson, una de las numerosas expertas que se muestra escéptica ante este anuncio, añadió de forma contundente: “Con los actuales conocimientos científicos, no creemos que se pueda completar un embarazo clonado en seres humanos”. La secta de los raelianos explicó que el método seguido para la clonación del bebé ha sido el mismo empleado con la oveja Dolly: la madre donó un óvulo al que supuestamente se vació el contenido genético y luego se le introdujo el núcleo de una célula de ella misma. Después le implantaron el embrión y tuvo un embarazo normal, según los raelianos.
El propio presidente de EE.UU., George W. Bush, dijo que está “profundamente consternado” por el anuncio y exhortó al Congreso a aprobar una legislación específica que prohíba este tipo de experimentos. Este anuncio tampoco ha sido bien recibido en el resto del mundo. En Italia, el Vaticano ha lanzado la alarma frente a esta iniciativa, calificada en diversas ocasiones por el Papa como “moralmente inaceptable”. El vicepresidente de la Academia Pontificia por la Vida, monseñor Elio Sgreccia, calificó la clonación como “una bomba atómica biológica”, de cuyos riesgos debe defenderse la humanidad.
El polémico ginecólogo italiano Severino Antinori, que ha afirmado haber participado en experimentos de clonación humana, calificó el anuncio de los raelianos como un intento de buscar publicidad y aseguró que carece de credibilidad científica. Pero Antinori anunció que el mes próximo nacerá el primer clon humano en un país que no ha querido precisar.
* El País/especial para Página/12.