Casi un millón de personas, la mayoría con vestimenta blanca, manifestó ayer contra la homofobia durante la XVI Parada del Orgullo Gay de Río de Janeiro. El evento, que tuvo lugar en las playas de Copacabana, se realizó bajo el lema “Somos todos iguales ante la paz - Toda forma de violencia debe ser crimen”. A la vez que reclamaron la reducción de asesinatos de homosexuales, los manifestantes reivindicaron la legalidad de las parejas del mismo sexo. El coordinador del proyecto Río Sin Homofobia, de la secretaría regional de Asistencia Social y Derechos Humanos, Claudio Nascimento, destacó que este año se celebra el reconocimiento de la unión civil homosexual por parte de la Justicia brasileña, iniciativa que fue liderada desde Río de Janeiro.