Las autoridades sanitarias santafesinas admitieron ayer que los centros de evacuados están a punto del desborde y con situaciones casi cotidianas de violencia a raíz del hacinamiento en el que están alojadas las casi 50 mil personas que todavía no pudieron regresar a sus casas. Los alertas sobre esta situación cayeron sobre el gobierno desde su Comité de Salud Mental, cuyo titular, Alejandro Ruiz Díaz, advirtió ayer sobre “la violencia generada por la desigualdad y la injusticia, junto a la violencia social que vive la sociedad en general y que por supuesto continúa en los centros de evacuados”. Ante este informe, el secretario de Salud de Santa Fe, Daniel Tardivo, señaló que hace más de una semana él mismo había advertido sobre las dificultades de convivencia, aunque reconoció que “todavía no hay ninguna decisión definitiva” sobre qué hacer con los evacuados. Ayer, el gobierno recibió otro alerta, esta vez con tono de denuncia: la organización Médicos Sin Fronteras (MSF) señaló que al menos tres mil personas “viven y duermen privadas de sus necesidades y derechos más básicos, en lugares sin condiciones sanitarias mínimas de habitabilidad”.
Así lo explicó ayer a Página/12 el coordinador médico de MSF, Rafael Socota. “Un lugar donde hay seis duchas para mil personas no sólo no es digno, es inhumano. No puede pensarse en que no existan situaciones de violencia cuando los derechos de una persona son violados constantemente”, señaló Socota. Y enfatizó la necesidad de que los damnificados sean trasladados de inmediato. “Apenas comenzó, esto era un desastre, pero cuando ya pasaron cuatro semanas es intolerable”, definió el médico.
En tanto, el titular del Comité provincial de Salud Mental, Alejandro Ruiz Díaz, informó que “diversas situaciones de violencia se producen a diario en los centros de evacuados, desde maltrato y abuso infantil hasta peleas provocadas por la desigualdad que se vive en estos lugares generada en el trabajo que hacen los punteros políticos”. El funcionario también explicó que “en la mayoría de los casos se trata de la reproducción de situaciones de violencia social que existen en todos los niveles y en cualquier parte del país y no de un producto de la inundación pero que la injusticia multiplica”.
Según el informe de MSF, la estación de Ferrocarril General Belgrano, donde unas mil personas están a la intemperie, el predio ferial y las carpas inundadas con las últimas lluvias son los tres centros en peores condiciones a los que se suman dos galpones donde también se alojaron familias evacuadas. “No se cumplen los estándares sanitarios internacionales, los mínimos, los básicos, esto es una letrina cada 20 personas y una ducha cada 50. La violencia se genera acá en la violación de los derechos más elementales. No pueden pedir tolerancia si no me dejan bañar ni lavarme la cara”, dijo Socota.
En base a las cifras oficiales que indican que 20 mil de los 50 mil evacuados han perdido completamente sus casas, el coordinador de MSF advirtió también sobre la necesidad de que se empiece a trabajar de inmediato para asegurar un alojamiento digno “a estas 20 mil personas que van a ser evacuados crónicos porque permanecerán en esta situación hasta que se haga un plan de vivienda o trabajo”.
Anoche, el Comité de Crisis se reunió en pleno durante más de tres horas. Estuvieron el secretario de Salud, Daniel Tardivo; el ministro de Obras Públicas, Edgardo Berli; el de Educación, Daniel Germano; el intendente Marcelo Alvarez, la flamante secretaria de Promoción Comunitaria, Celia Arena, y el director provincial de Defensa Civil, Eduardo Filomena, entre otros. Sin embargo, nada se informó sobre las medidas que se tomarán a partir de ahora para resolver una situación que ya reconocieron como “intolerable”.
Tardivo destacó ayer la necesidad de atender la situación de los evacuados ante “los inconvenientes de todo tipo que existen en los centros, alteraciones de la convivencia, inclusive con casos de violencia sobre niños”. Y alertó que si eso no se toma en cuenta, “el punto de saludmental se termina convirtiendo en un problema epidemiológico”. El titular del Comité de Salud Mental definió los casos de violencia como “la reproducción de una realidad que para mucha gente estaba lejos y no se veía pero que existe en todas partes del país y en todos los niveles”. Y ejemplificó: “Desde pandillas hasta padres golpeadores o casos de abuso infantil que, cuando vemos el peligro de que se reproduzcan acá, avisamos a las autoridades”.
Según las últimas cifras oficiales, ayer los evacuados eran 47.304 alojados en 290 centros en los que se mantienen los controles sanitarios dado que hubo un aumento en los casos de hepatitis, diarreas y de posibles casos de leptospirosis. Así lo informó el Centro Operativo de Salud (COS), que precisó que hasta ayer se notificaron 73 casos de hepatitis, 19 en centros de evacuados, 49 de diarreas, 20 de varicela y 97 de leptospirosis de los cuales sólo 26 fueron confirmados por laboratorio.
Sobre el riesgo de epidemias, el coordinador médico de MSF coincidió en que se esperan más casos de leptospirosis pero aseguró que la situación sanitaria, a pesar de las terribles carencias sobre las que esta organización advirtió, no está en peligro de colapsar: “El mayor riesgo que tenemos hoy es la basura”.

Producción: Paula Bistagnino.