Organizaciones defensoras de los Derechos Humanos y sobrevivientes del denominado “Motín de los colchones”, ocurrido en marzo de 1978 y en el que murieron calcinados o a tiros 65 personas detenidas en la cárcel de Devoto, reclamarán este jueves que el hecho sea considerado como un delito de lesa humanidad cometido por la última dictadura militar. “Se construyó un motín que nunca existió y se masacró a decenas de personas. Algunas fueron sometidas a torturas antes de morir. Todo se hizo en el contexto de las políticas de represión y exterminio de la dictadura sobre determinadas poblaciones, en este caso, la penal”, señaló Claudia Cesaroni, integrante del Centro de Estudios en Política Criminal y Derechos Humanos (Cepoc) e impulsora de la iniciativa. Cesaroni también dijo que “varias de las 65 víctimas fallecieron por los disparos que los guardias del penal efectuaron a las celdas del Pabellón 7”.