La exhumación y autopsia de los cadáveres de los diez bebés que murieron en los últimos ocho meses en una clínica de la capital cordobesa podría ser decisiva para determinar la causa de las muertes, según la opinión del abogado de una de las familias afectadas, quien solicitó la medida a la Justicia.

“Con el último bebé muerto al poco tiempo de nacer serían diez las víctimas fatales en un lapso estrecho, entre octubre de 2012 y junio pasado. La exhumación de todos los cadáveres y la autopsia serán clave para determinar la etiología de estas lamentables muertes”, aseguró el abogado Carlos Nayi.

El profesional formuló ayer una nueva denuncia penal por la muerte de otro bebé, el 14 de marzo pasado (había nacido nueve días antes), “en una unidad de terapia intensiva de la clínica Sanagec”, ubicada en la capital cordobesa. “Si bien era un bebé prematuro, que estaba evolucionando, falleció con una sintomatología similar a la de los otros y pese a que los médicos del sanatorio dijeron que se trató de un virus en la sangre”, explicó Nayi.

El letrado aseveró que podría tratarse de “una bacteria intrashospitalaria” que habría afectado a los bebés, los que se desprende del “relato de cada madre y de la declaración de una enfermera”.