Los funcionarios nacionales y de la provincia de Buenos Aires, en forma coincidente, siguieron apoyando la política de crear nuevas fiscalías y de avanzar sobre el negocio de los desarmaderos, como forma de encarar la “batalla” contra la inseguridad en el área metropolitana. El ministro de Justicia y Seguridad, Gustavo Beliz, dio ayer su respaldo a la creación de fiscalías “en cada uno de los barrios” de la ciudad de Buenos Aires, como una forma de colaborar en la prevención del delito y de verificar, además, si los funcionarios judiciales “están trabajando o si se van a la una de la tarde a jugar al golf”. Por su parte, el ministro de Seguridad bonaerense, Juan Pablo Cafiero, insistió en que la meta del gobierno provincial es “terminar con el negocio de los desarmaderos” y de los “robos de automotores” que, en conjunto, según datos oficiales, “movilizan unos 400 millones de pesos mensuales”.
Beliz participó de un encuentro con vecinos de Villa del Parque, junto al secretario de Seguridad, Norberto Quantín, y el subsecretario José María Campagnoli. El ministro Beliz consideró “muy importante” el aporte de los vecinos y la experiencia, en materia de fiscalías, desarrollada por Quantín “en los barrios de Saavedra y de Núñez”. Beliz apoyó una iniciativa similar que llevan adelante los vecinos de Villa del Parque, a la que consideró “el puntapié inicial para que se pueda instalar rápidamente una fiscalía aquí y en diversos puntos de la ciudad, como ser en La Boca y Constitución”, entre otras zonas de la Capital Federal.
“La idea –dijo Beliz– es que la Justicia esté cerca de los vecinos y que cada vecino no sea un número o la estadística de un expediente.” El ministro insistió en que los “controles de calidad” del accionar de la Policía Federal se harán “con transparencia y decisión”. Opinó que para “terminar con el delito común hay que cumplir con un requisito previo que es terminar con el delito político y con todo tipo de connivencia entre la corrupción política y los elementos de corrupción delictiva común”.
Durante el encuentro realizado en Nazca al 3300, Beliz pidió la participación de los vecinos y, citando palabras de Quantín, dejó sentado que son ellos los que “van a poder comprobar a qué hora se apaga la luz de la oficina de una fiscalía de barrio, para saber si está trabajando o si (el funcionario judicial) se va a la una de la tarde a jugar al golf”.
El mismo mensaje estuvo en boca del ministro de Seguridad bonaerense, Juan Pablo Cafiero, quien insistió en que se busca poner fin al negocio de los desarmaderos, en tarea conjunta con la Nación. Cafiero consideró que “es muy importante que los jueces y fiscales acompañen este esfuerzo”.
Sobre el tema, Quantín puntualizó que en algunas áreas de la Capital, entre ellas Villa del Parque, los últimos operativos “han dado muy buenos resultados”. El funcionario nacional aseguró que “el número de vehículos robados ha descendido brutalmente por los operativos cerrojos”.
Según Quantín, existe “una relación muy concreta entre la disminución de los robos de autos y el control que se hace en la (avenida) General Paz, que es la vía por la cual se va a los desarmaderos”. El ex fiscal afirmó: “Hemos cerrado esa vía y los resultados están a la vista ya”. Ayer se realizaron 23 operativos en distintos puntos de la Capital y del Gran Buenos Aires, para combatir el robo y el desguace de automóviles. Se trata de la modalidad delictiva que provoca la mayor cantidad de muertes, dato que está relacionado íntimamente con la inseguridad.
Los operativos posibilitaron el secuestro de miles de autopartes de unos 400 autos de procedencia presuntamente ilícita. Cafiero agregó, por su parte, que a partir de los allanamientos contra desarmaderos impulsados por el gobernador Felipe Solá desde diciembre del año pasado “se secuestraron alrededor de 25 mil automóviles robados, mercaderías y repuestos por 30 millones de pesos”.
También se produjeron “unos tres mil detenidos”. Entre ellos, algunos policías. En ese contexto Solá firmó cinco decretos con el fin enunciado de combatir la ola de inseguridad. También habló sobre el tema de los desarmaderos el director general de Investigaciones Complejas y Narcocriminalidad de Bonaerense, comisario Angel Casafús, quien afirmó que en la última semana hubo “una lucha más directa” contra el robo de automotores, aunque no explicó por qué antes no podía hacerse lo mismo. Casafús dijo que se detuvo a “muchísimas personas vinculadas al robo de automotor, al desarme de vehículos y la venta de autopartes”. Casafús aseguró que “muchos de los rodados secuestrados en los allanamientos a desarmaderos del Partido de la Costa tenían en su interior manchas de sangre”. Según el comisario, muchos de los desarmaderos “tienen la fachada de un comercio legal” y cuentan con habilitaciones, pero “entre ellos se mezclan los repuestos robados”.