Un paquistaní fue detenido en la Argentina acusado de falsificar documentación y sospechado de estar implicado en el tráfico de personas en varios países, luego de que intentó renovar una visa de residencia en la Cancillería. Otras tres personas de igual nacionalidad fueron también arrestadas por el caso.

Azjad Iqbal, un presunto falsificador con antecedentes en Francia, Cuba, EE.UU., Chile y Portugal, fue detenido junto a Ahmed Anees, otro de los implicados, cuando se presentaron en la Cancillería argentina para obtener la renovación de una visa de cortesía emitida a favor del segundo. Se supo que la visa de Anees y las de otras cinco personas –algunas aún siguen siendo buscadas– fueron obtenidas mediante documentación que resultó ser apócrifa. Los sospechosos fueron detenidos en el lugar. Las tareas de inteligencia derivaron en el arresto de otras dos personas, también de igual nacionalidad. Iqbal dijo que sólo ofició de traductor, y no sabía de ninguna documentación ilegal. El juez Sebastián Casanello encontró que poseía antecedentes. Iqbal ya había sido acusado por este tipo de delitos.

La Unidad de Investigaciones Antiterrorista de la Policía Federal informó que en Portugal tuvo una causa en 2004 por uso de licencia de conducir falsa. Además, en 2010 fue investigado en Francia por facilitar la entrada y salida de un extranjero mediante documentación irregular. En Chile había sido sospechado por la misma maniobra; y en 2013, en Cuba, fue acusado por tráfico de personas.

Asimismo se le encontró en su PC portátil gran cantidad de pasaportes de distintas nacionalidades, copias de permisos de entrada a Emiratos Arabes y de boletos aéreos de distintas personas. La Embajada de Estados Unidos aportó al juez un informe en el que Iqbal sería parte de una organización destinada a promover el contrabando de personas, principalmente de Pakistán, la India y Afganistán.