Carla esconde la cara detrás de sus pequeñas manos; la maestra le dice que se saque el dedo de la nariz pero ella, de tres años, no le hace caso y se oculta detrás de su muñeca. Al lado, un vecino escucha bailanta. A cuatro cuadras, unos chicos pasan delante de un cementerio de autos quemados. Y a diez, médicos residentes atienden a cientos de madres con sus hijos en un centro de salud levantado hace veinte años en un edificio abandonado. Ciudad Oculta, Mataderos. El futuro, esa palabra eclipsada por el presente, aparece de a ratos en el comedor para niños en el que ahora Carla juega con sus otros compañeros: llegó desde el partido italiano Democracia de izquierda, que lanzó una campaña de solidaridad en Italia e implementó, a través de una ONG internacional, un programa de intervención social en el país con el que se alimenta a 4000 chicos y se da trabajo a pequeños productores.
“La idea de la campaña es generar una práctica de la solidaridad. En lugar de enviar comida desde Italia, se juntan recursos y se los vuelca al circuito productivo argentino”, explicó a Página/12 María Rosa Arona, la representante del partido Democracia de izquierda (el nuevo nombre del Partido Comunista italiano, liderado por el ex primer ministro Massimo D’Alema). En febrero, los demócratas de izquierda italianos lanzaron la campaña “Niños, un gesto de solidaridad para el futuro de la Argentina”, a través de la cual se brinda ayuda a 26 comedores infantiles distribuidos en la capital, Gran Buenos Aires, La Plata y Rosario.
La implementación técnica del programa, que ya lleva un millón de pesos recaudados, está a cargo del Instituto de Cooperación Económica Internacional (ICEI) –una ONG italiana dedicada al desarrollo de microemprendimientos en América Latina y Africa–; el Círculo político y cultural Enrico Berlinguer (referente de los demócratas de izquierda en la Argentina) fiscalizó la selección de los comedores: “Se eligieron comedores con un buen nivel de inserción en su territorio, con un alto grado de participación popular por fuera de los punteros de turno y con perspectivas de desarrollo social”, dijo Arona. La presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela Carlotto, y el premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, son los garantes de la transparencia de la campaña.
El Centro Popular Mataderos, ubicado en Eva Perón 6336, en la manzana 1 de la villa Ciudad Oculta de la Capital, se incorporó al programa y en abril creó un jardín-comedor para niños de uno a siete años.
En el comedor trabajan dos maestras, dos cocineras y una colaboradora; todas cobran un plan Jefas y Jefes de Hogar de 150 pesos. “La mayoría de los chicos llegaron desnutridos y todavía no recuperaron su peso. Al principio no tenían ganas de comer; hay que jugar con ellos para que se sientan cómodos y se diviertan. Cada mes fueron aumentando 200 gramos pero en el invierno algunos se resfriaron y volvieron a bajar de peso”, contó Betty Palacio, colaboradora del Centro Popular, creado en 1983.
El director de la ONG italiana ICEI, Franco Borelli, viene al país cuatro veces por año pero no deja de sorprenderse: “Este país es más rico que Italia; produce carne, soja, trigo, maíz y hay situación de hambre. La riqueza está en manos de pocos y hubo una estrategia política que lo permitió. Acá no existen pequeñas y medianas empresas que produzcan y den trabajo. Se hace siempre lo mismo y así no se puede vivir”. ICEI utiliza los fondos que llegan de Italia para comprar alimentos a pequeños productores –a través de la Federación Agraria Argentina– y para que los mismos comedores desarrollen microemprendimientos.
“Tenemos el proyecto de organizar una pañalera comunitaria. Ahora hacemos 200 pañales por día y los donamos al Jardín Maternal del barrio. Creemos que de los comedores comunitarios tenemos que pasar a espacios educativos y productivos”, señaló el secretario del Centro Popular Mataderos, Carlos Pertierra. Si bien la campaña de los demócratas de izquierda termina en febrero, el partido italiano está tratando de que federaciones, municipios y círculos culturales de Italia “apadrinen los distintos proyectos de los comedores y continúen con la construcción deuna red social en cada barrio”, dijo la directora del Círculo Enrico Berlinguer.

Producción: Gabriel Entin