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Un funcionario municipal de la provincia de La Pampa fue liberado en una causa de violencia de género, donde se lo acusa de golpear en la vía pública y secuestrar a su ex pareja con un auto oficial, mientras que la Justicia le otorgó un botón antipánico a la víctima.

El juez de Control Fernando Rivarola decidió ayer liberar a Rubén Suárez, a quien le impuso una restricción de acercamiento a la mujer, Silvia Viglianco, y a un vecino que vio lo que ocurría y la ayudó a escapar, identificado como Jorge Cabral.

El hecho ocurrió el 16 de diciembre último por la noche cuando Suárez, quien está a cargo del área de Tránsito de Santa Isabel, agredió a Viglianco en la vía pública y la trasladó varios kilómetros en un auto de la comuna por la ruta.

Cabral vio la agresión, alertó a la policía y siguió al vehículo. “Estoy viva por el compromiso de los vecinos, un vecino vio todo, siguió el auto y me salvó”, agradeció la mujer.

“En todo momento temí por mi vida, me agredió en la calle cuando salí caminando para ir a una cena de docentes, me golpeó y me subió al auto casi inconsciente. Salió a la ruta y manejaba desencajado, hacía maniobras como para chocar”, contó la mujer agredida.

La fiscal Alejandra Moyano, a cargo de la investigación, ordenó la detención de Suárez, quien hoy recuperó la libertad, le ordenó que no se acercara a su ex pareja y le dio a ella un botón antipánico para que pidiera ayuda si el hombre viola la orden de restricción e intenta agredirla nuevamente.

Este es el segundo caso en pocos días en que la Justicia local entrega un dispositivo de este tipo a una víctima de violencia de género y libera al acusado, tras el de un militar que amenazó a su ex pareja y violó la restricción de acercamiento.

Familiares de Viglianco reclaman al intendente de Santa Isabel, José Luis Rodríguez, que “tome cartas en el asunto” sobre la situación de Suárez. “Todavía no he recibido ni un llamado del municipio”, cuestionó la víctima.