SOCIEDAD
› EMPEZARAN A COBRAR LAS MULTAS FOTOGRAFICAS
El adiós a las advertencias
Las multas fotográficas volverán a ser efectivas para algunas infracciones de tránsito que se encontraban bajo el sistema de advertencias. El gobierno porteño resolvió que, cuando el registro fotográfico detecte autos estacionados en calles de alto tránsito y también excesos en la velocidad máxima permitida, se vuelva a sancionar a quienes incurran en esas faltas. Hasta ahora, las autoridades sólo advertían a los infractores. Pero en adelante éstos recibirán en sus domicilios las correspondientes multas. Además, se prorroga por sesenta días la campaña de educación vial para la comunidad.
Esto significa que se incorpora al sistema de sanciones fotográficas el estacionamiento indebido de autos en las calles de alto tránsito con jerarquía de red de circulación primaria y cualquier exceso sobre la velocidad permitida. Infracciones que se suman a otras que ya se penalizaban, como la violación de luz roja en los semáforos y los estacionamientos graves y en avenidas.
“Cuando quisimos aplicar el sistema de multas fotográficas de golpe, casi se armó una revolución”, explicó la directora de Seguridad Vial porteña, Leticia Piris. Por eso, el sistema de advertencias tuvo como objetivo no sancionar, en sus primeras instancias, las infracciones cometidas, sino abocarse “a la instrucción de la población sobre las normas que rigen el tránsito y sobre las consecuencias sociales que trae el no respetar esas leyes”.
“Notamos una mejora sustancial en cuanto al comportamiento de los conductores, hemos logrado disminuir la cantidad de casos de excesos de velocidad en comparación con años anteriores, también en lo que se refiere a malos estacionamientos”, señaló a Página/12 la directora.
Lo cierto es que las estadísticas cambiaron: en 2003 se produjeron 71 muertes contra 83 en 2002 y 147 en 2001. “Esto nos indica que la gravedad en los accidentes cometidos en la ciudad ha descendido. Y esto permite tener menos heridos, menor dolor en las familias, menores pérdidas sociales y menores gastos en reparación de injurias por parte del gobierno”, indicó Piris.
La campaña de educación vial seguirá por sesenta días, que se intensificará en los barrios porteños, y con ello el objetivo de disminuir cantidad de accidentes y que se pierdan menos vidas.