SOCIEDAD
› LAS MUJERES SON MAS VULNERABLES AL TABACO
El riesgo del humo femenino
Una investigación de la Sociedad de Radiología norteamericana demuestra que las fumadoras tienen el doble de posibilidades de desarrollar un cáncer de pulmón que los hombres fumadores.
Por Miquel Noguer *
Desde Barcelona
Los jóvenes han borrado las antiguas diferencias que separaban a hombres y mujeres, al menos en materia de tabaquismo. Las últimas encuestas de salud realizadas entre los jóvenes no aprecian diferencias sustanciales entre los hábitos de ellos y ellas: fuman lo mismo y en cantidades similares. Pero lo que no se reparte de forma equitativa son los riesgos derivados del tabaco: las mujeres son más vulnerables.
Así lo confirma un ensayo de la Sociedad de Radiología norteamericana, que descubrió que las fumadoras tienen el doble de posibilidades de desarrollar un cáncer de pulmón que los hombres fumadores. Los datos proceden de una experiencia de screening o cribado mediante radiología de tórax para la detección precoz del cáncer. El estudio, presentado recientemente en la cumbre anual de Radiología de Norteamérica, se realizó en 2968 fumadores y fumadoras de más de 40 años. Entre ellos se diagnosticaron 77 casos de cáncer de pulmón.
Aunque el estudio americano no hace hincapié en las causas de esta diferencia, los genetistas tienen claro que, entre otros factores, las mujeres tienen más riesgo de cáncer por su menor capacidad reparadora del daño genético causado por los carcinógenos presentes en el tabaco.
Tras analizar las medidas de los nódulos detectados en los pulmones, la edad de los pacientes, el sexo y la cantidad de tabaco que consumían, los radiólogos norteamericanos dictaminaron que el riesgo de cáncer entre las mujeres fumadoras era el doble que el de los hombres con el mismo hábito.
El director científico de Investigación Oncológica del Instituto Catalán de Oncología y jefe de oncología del Hospital Germans Trias i Pujol de Badalona, Rafael Rosell, considera que los datos de este estudio deben interpretarse con cautela, “puesto que no puede decirse cómo habrían evolucionado los nódulos detectados si éstos se hubieran hallado antes”. El científico recuerda que “sólo el 1 por ciento de los nódulos acaba siendo maligno”.
En lo que sí coinciden totalmente los autores del estudio norte-americano y Rafael Rosell es en afirmar que las mujeres tienen menos capacidades para evitar que los tumores entren en fase de metástasis. Según Rosell, “el sistema de reparación del daño celular causado por los carcinomas es más lento en las mujeres porque tienen menos capacidad para expulsar del organismo los agentes nocivos”. Pero, al mismo tiempo, esta teoría también sirve para explicar por qué la quimioterapia es más efectiva en mujeres que en hombres. Ellas retienen mejor los componentes de la terapia, explica Rosell.
En cuanto a utilizar el cribado para detectar el cáncer en fases iniciales, algo vital en otro tipo de cánceres, como el de mama, Rosell se muestra más escéptico, ya que tanto las mujeres como los hombres que han fumado tienden a desarrollar nódulos de varios milímetros que nadie puede predecir si algún día desembocarán en una metástasis.
Sin embargo, Rosell defiende las técnicas radiológicas para la detección precoz del cáncer de pulmón en la población mayor. “La posibilidad de que un nódulo genere un cáncer es el 20 o el 25 por ciento superior entre las personas de más de 50 años que siguen fumando”, aclara el investigador.
* De El País de Madrid. Especial para Página/12.