La calurosa tarde de sol mutó en noche, viento, lluvia y tragedia. Un tornado pasó ayer por el noroeste de la capital de Córdoba y provocó al menos tres muertos –entre ellos un bebé de un año y ocho meses–, dos desaparecidos, 45 heridos y cientos de evacuados. El temporal destruyó centenares de casas; las calles se transformaron en ríos caudalosos y los autos fueron arrastrados a cuadras de donde estaban estacionados. Una tormenta de menor intensidad pasó por Villa Carlos Paz, donde también hubo voladuras de techos, caída de postes de electricidad y dejó al menos a tres personas heridas.
El temporal de agua, vientos de hasta 200 kilómetros por hora y granizo no diferenció clase social: destruyó gran cantidad de viviendas y en villas de emergencia en barrios residenciales, como San Roque, donde hubo dos muertos a causa del derrumbe de dos casas. Emergencia Civil de la Municipalidad de Córdoba definió el temporal como “un tornado con rumbo errático”, que entró en la región por el noroeste y salió hacia el este, por la zona rural de Montecristo. Los barrios más afectados fueron Ameghino norte, el residencial San Roque, Los Ganados, el de la Escuela de Suboficiales de Aeronáutica y los barrios humildes de La Tela, Unión y Rogelio.
El fenómeno meteorológico comenzó a las 15.30 con lluvias intensas, vientos muy fuertes y caída de granizo. La ciudad, que soportaba una temperatura de 32 grados y altísimos niveles de humedad, quedó de pronto casi a oscuras, como preanuncio del tornado que derribó postes del tendido eléctrico, de teléfonos y voló centenares de techos: innumerables chapas de zinc quedaron dobladas como hojas de papel. Además, hubo un importante apagón en gran parte de la capital, por lo que el intendente Luis Juez convocó al Comité de Emergencia. Adrián Calvo, vocero de la Empresa Provincial de Energía Eléctrica (EPEC), calculó que un tercio de la ciudad estaba sin luz ayer a la tarde por el paso del temporal.
El bebé falleció en el hospital de niños después de que una pared se le cayera encima en el barrio San Roque. En el mismo barrio, una mujer de 45 años y un hombre de 60 murieron por el derrumbe de dos casas. Los voceros de la Secretaría de Salud provincial afirmaron que la mayoría de los heridos eran niños, que tenían cortes y golpes por los derrumbes. Además, explicaron que el temporal de lluvia y granizo comenzó a las 15.30 y terminó cerca de las 17, mientras que el tornado, afirmaron, duró veinte minutos.