Por el doble crimen de la jubilada japonesa y su vecino, que fueron hallados maniatados, golpeados y parcialmente calcinados en una casa de Florencio Varela, los investigadores analizaban si el hecho está vinculado con una venganza cometida por ladrones que hace un tiempo no habían logrado robar en la casa porque fueron perseguidos a los tiros por el marido de la víctima. El fiscal Darío Provisionato dijo que los vecinos contaron que hace seis meses Yoshiko Kumakura, de 73 años, y su marido sufrieron un intento de robo en la casa de la calle Cariboni 2127, y que “el japonés los espantó efectuando un par de tiros al aire”. El fiscal y la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Quilmes estudian cuál pudo ser el móvil del crimen y, aunque la casa no estaba revuelta, no se descarta el robo, por lo que se aguarda la llegada desde Japón del viudo de la víctima para que confirme si hay algún faltante.