La intendenta de una localidad de La Pampa se salió de sus casillas cuando el comisario de esa localidad detuvo a su cuñado en un procedimiento por quiniela clandestina. “Me increpó, me humilló...”, se quejó el funcionario, quien recibió “total respaldo” de sus superiores.
Gustavo Quiña, comisario de Bernardo Larroudé –210 kilómetros al norte de Santa Rosa, La Pampa–, bajo orden judicial, efectuó un procedimiento que condujo a la detención del cuñado de la intendenta, María Cristina Passo de García, en una investigación contra la quiniela ilegal. De inmediato, la funcionaria citó a Quiña a su despacho.
“Al hacerme presente, la intendenta comenzó a increparme y humillarme, manifestándome que con nuestro accionar habíamos manchado el nombre de su familia”, contó el comisario y agregó que la intendenta le ordenó “que tapara todo lo que había ocurrido”.
El funcionario policial señaló que Passo lo trató con “términos ofensivos y deshonestos” y dijo que “al ver que de ninguna manera la mujer, que estaba muy fuera de sí, deponía su actitud, opté por alejarme del lugar”. Quiña destacó que “no nos fijamos de quién se trata cuando debemos reprimir acciones fuera de la ley”.
El jefe de la Unidad Regional II, comisario Roberto Ayala, advirtió que Quiña “tiene nuestro total respaldo y también lo ha hecho llegar el ministro de Gobierno, Juan Carlos Tierno”.