Hace casi veinte años que el tradicional cine El Plata cerró sus puertas y se convirtió en un depósito. Pero luego de que un grupo de vecinos se movilizara para recuperar ese histórico edificio –según informó Página/12 en noviembre de 2004–, el gobierno porteño formalizó ayer su compra y lo convirtió en patrimonio de la ciudad para convertirlo en un centro cultural. “Este es uno de los días más felices para Mataderos”, opinó Sonia, una de las tantas vecinas de ese barrio que colmó ayer el Salón Blanco del Ejecutivo porteño, donde se firmó la compra del local.
El Plata, en la avenida Alberdi al 5700, fue la sala más lujosa e importante de Mataderos, no sólo porque sus tres niveles alojaron a dos mil espectadores, sino por el valor histórico que lo convirtió en el cine barrial donde se estrenaron los films de la “época de oro” del cine argentino en simultáneo con los del centro porteño. Su decadencia fue acompañada por la del barrio y “su recuperación tiene que ver con la recuperación del ciclo vital de la Argentina y la ciudad”, señaló el secretario de Cultura, Gustavo López.
Uno de los objetivos de la compra –por iniciativa del legislador Norberto La Porta– fue convertir a la ciudad “en un gran centro cultural”, afirmó el jefe de Gobierno, Aníbal Ibarra. “No sólo con actividades culturales en el centro sino también en los espacios más emblemáticos de cada barrio”, agregó.
El monto de la transacción fue de 1.725.000 pesos. Y pese a que aún no se definió el modo en que se lo recuperará, algunos vecinos presentaron un proyecto para convertirlo en un espacio múltiple para diversas expresiones culturales. Para festejar la compra, el barrio organizó un festival que tendrá lugar hoy, de 16 a 21, frente al histórico cine; habrá talleres de murales, grupos de teatro comunitario y un recital del grupo musical Me darás mil hijos.