Los policías acudieron ante el llamado de auxilio: un auto se había accidentado, en una oscura carretera de Formosa, y su conductor había llamado a la secccional pidiendo auxilio. Pero la tragedia rondaba esa noche y en ese lugar: tanto que el auto policial, que llegó a toda velocidad, atropelló al hombre que había pedido auxilio, que aguardaba parado en medio de la ruta. La víctima es un sacerdote católico, quien falleció en el momento como consecuencia de las heridas recibidas. Atravesada en el camino, quedó su camioneta, con una pasajera a bordo, una religiosa que había resultado herida en un accidente anterior, cuando el vehículo embistió un caballo.

El accidente ocurrió el domingo por la noche sobre la ruta nacional 81, a unos 15 kilómetros al este de la localidad de Las Lomitas. El sacerdote Kanura Joseph Kinjua, oriundo de Kenia, viajaba junto a la monja franciscana Adelina Ferreira desde la localidad de Pozo del Tigre hacia el oeste de la provincia cuando en medio de la oscuridad un caballo se interpuso en su viaje.

A raíz del choque, la monja sufrió heridas diversas en brazos y piernas, en tanto que el sacerdote –también golpeado– pudo llamar por celular a la policía de Las Lomitas, desde donde partió en su auxilio un auto conducido por dos oficiales.

Pero lo que iba en camino de ser un auxilio terminó en una tragedia, ya que el sacerdote se paró en medio del asfalto para alertar al auto que concurría en su auxilio de que la camioneta había quedado cruzada sobre la ruta, pero los policías no lo vieron y lo llevaron por delante.

La violencia del choque del auto con los policías fue de tal magnitud contra el cuerpo del religioso que falleció inmediatamente, dijeron fuentes policiales.

En tanto, la monja fue testigo del accidente ya que había quedado en el interior de la camioneta. También resultaron heridos el comisario mayor Bernardino Velazco, jefe de la Unidad Regional 4 de Las Lomitas, y el comisario inspector Andrés Fernández.

Los policías se reponían ayer de las heridas en el Hospital de Alta Complejidad de Formosa pero tanto ellos como la religiosa no corren riesgo de vida.