El fiscal Marcelo Pernisi debe decidir esta semana si le pide al juez de Garantías, Javier Romaniuk, la detención de José Arce, el ex marido de Rosana Galliano. En los tribunales de Campana la mayoría apuesta a que Arce estará más pronto que tarde entre rejas, pero se dice que las evidencias tendrán que ser sólidas para convencer al magistrado. La familia de Rosana acumuló esta semana una larga serie de indicios para pedir la indagatoria de Arce, lo que llevaría a su detención. En el escrito se pregunta, por ejemplo, por qué Arce llamó al celular y no al teléfono de la casa de Rosana, teniendo en cuenta que sabía que el celular no tiene señal dentro de la vivienda. La conclusión que sacan es que Arce quería que Rosana saliera a la galería donde efectivamente le dispararon. Para los padres de Rosana, además, la joven sufrió el 14 de octubre pasado un insólito asalto, a metros de un campo de Arce, y califican aquella intentona como la primera tentativa de asesinato.

Con la firma de los doctores Víctor Stinfale y Roberto Babington, los padres de Rosana enumeran los indicios en contra de Arce:

- La llamada al celular y no al teléfono de línea de la casa, lo que llevó a Rosana a salir a la galería. Allí la asesinaron.

- La coartada de Arce es que a esa hora estaba en el hospital de Pilar llevando a su hijo al médico. Andrés Zaracho, el cuidador del campo de Arce, dice que el ex marido de Rosana le pidió que lo acompañara al hospital, algo totalmente inusual. Zaracho afirma que le pareció raro y la familia de Rosana concluye que lo llevó para certificar su coartada.

- Cuando le preguntaron a Arce para qué llevó a Zaracho al hospital, la respuesta fue, como mínimo, extraña. La vocera fue su madre y explicó que fue por si había problemas de estacionamiento, algo impensado allí.

- Además, no se trataba de un caso de urgencia. El chico tenía anginas y, por otra parte, fue llevado a un médico particular unas horas antes, por lo cual la familia de Rosana también sugiere que incluso la concurrencia al hospital fue para sembrar la coartada.

- La reacción de Arce está igualmente bajo sospecha. Cuando le dicen que le dispararon a Rosana no se inmuta. Ni siquiera se lo comentó a Zaracho. Tras cartón, pidió un remise y envió a su hijo Andrés y a Zaracho de regreso al campo. Lo asombroso es que no se dirigió al Remanso, donde habían matado al supuesto amor de su vida, sino que concurrió a la comisaría de Robles. Los padres de Rosana suponen que quiso fortalecer todavía más su coartada.

- En la comisaría produjo otro hecho llamativo. Se ofreció a entregar su celular como prueba, sin que se lo hubieran pedido.

u Para los padres de Rosana, todos los movimientos de aquel día demostrarían que Arce mandó a matar a Rosana y quería, sea como fuere, demostrar que no estaba en el lugar del asesinato.

- En el escrito, los abogados Stinfale y Babington hacen un relevamiento de los episodios de violencia de Arce contra Rosana, incluyendo cinco constancias judiciales. Las denuncias de agresión empezaron el 28 de diciembre de 2005, hubo otra el 19 de junio de 2006, la tercera el 27 de junio de 2007 y una pericia médico-forense realizada dos días más tarde. En ese estudio los médicos corroboran que Rosana tenía un hematoma de dos centímetros por cinco, “producto de choque o golpe con un elemento de superficie dura y rugosa, excoriación en dorso de ambas manos que data de uno a tres días producto también de golpes con superficie dura y rugosa”.

- En el escrito judicial, los padres recuerdan que Arce fue excluido del hogar por el juzgado de paz de la zona.

- Hay un largo listado de testimonios de las agresiones, pero tal vez el más independiente es el de la dueña de un locutorio, cercano a la casa de Rosana. Es que Arce tenía inhabilitada la línea de Rosana para hacer llamadas hacia fuera, por lo que la joven tenía que recurrir al locutorio. Dice la testigo Nicoletti que Arce agredía a su ex mujer y que incluso una vez la corrió hasta el locutorio. También hay varios testimonios sobre las amenazas. Por ejemplo, existe una grabación de un mensaje de voz que Arce dejó en el teléfono de Rosana cuando hacía rato que estaban separados: “¿cómo no atendés el teléfono? La puta que te parió. ¿Le estás chupando la p... al negro? Puta asquerosa”.

- La familia de Rosana entiende que hubo una primera tentativa de asesinar a la joven el 14 de octubre pasado. Dos personas le cruzaron un auto a Rosana en pleno campo, a metros de la propiedad de Arce, llamada La Dulzura. Estaban encapuchados. El lugar ni siquiera tiene calles y no hay antecedentes de robo de autos en un sitio de esa naturaleza. Rosana alcanzó a bajarse y se metió en el campo de Arce, escapándose de los dos individuos. Le robaron un Fiat Palio y Arce le sugirió que hiciera una denuncia livianita, sin mencionar que la habían asaltado a mano armada.

En las casi cien páginas del escrito, los abogados afirman que Arce debe ser indagado por su comportamiento aquel día, porque venía agrediendo y amenazando a Rosana, porque ella le estaba pidiendo el divorcio, por lo que se quedaría con la mitad de sus propiedades y porque los celos lo consumían, debido a que Rosana mantenía otras relaciones. La próxima movida provendrá de la Justicia.