Los 250 pesos por semana no son suficientes para que Leonor Torres compre lo necesario para su hijo, que sufre epilepsia. La Justicia había determinado que podía disponer libremente de los fondos que su ex marido deposita en una caja de ahorro. Pero en el BankBoston de Callao al 1600 desconocieron la orden judicial y no le entregaron el dinero. Por eso, presentó una denuncia penal contra el titular de la entidad, Manuel Sacerdote, y dos funcionarios de la sucursal. Este diario quiso conocer la posición del banco, pero allí declinaron cualquier respuesta.
“Pedimos a la Justicia que Torres pudiera acceder al dinero sin restricciones, porque con los 250 pesos semanales de la cuota alimentaria no llega a atender todos los gastos”, explicó a Página/12 el abogado Eduardo Barcesat, que patrocina a Leonor Torres. La medida fue favorable: el juez en lo civil Miguel Ricardo Güiraldes notificó al BankBoston que debía permitir el libre acceso de su cliente al dinero.
“Se presentó el 21 de enero con el fallo judicial pero le pidieron que vuelva otro día, el 22 directamente le dijeron que no le darían la plata”, comentó Barcesat. La gerente Laura Tiburzio no dio explicaciones sobre el por qué de esa decisión. A partir de allí, Barcesat promovió una querella penal contra Sacerdote, Tiburzio y el contador Martín Furze por “desobediencia y resistencia a la autoridad”, cuya pena es menor a tres años, es decir, excarcelable. La demanda recayó en el juzgado en lo correccional número 13 de Ana Bulacio.
Ayer la justicia envió un oficio al presidente del banco “diciendo que las decisiones no se discuten, se obedecen”, señaló el patrocinante. Además, se dispuso una multa de 3000 pesos por cada día que pase sin que Torres obtenga su plata. Los abogados de la entidad apelarían la medida “pero no van a poder hacerlo porque no son parte en el juicio de alimentos”. “Ningún funcionario salió a hablar del tema”, acusó Barcesat. Y elevó la apuesta: “Si mañana (por hoy) no le pagan, podría caberles el delito de asociación ilícita”.