- Usar las funciones de gestión de energía de la pc y el monitor.

- No usar protectores de pantalla. No son necesarios en los monitores modernos. Los estudios demuestran que consumen más energía que si se deja que el monitor se atenúe cuando no se utiliza.

- Al comprar una pc nueva, priorizar la eficacia energética.

- Bajar el ajuste de brillo del monitor. El ajuste de brillo más alto del monitor requiere el doble de energía que el más bajo.

- Apagar los periféricos (como impresoras, escáneres y altavoces) cuando no se usan.

- Combatir el consumo por “corriente fantasma”; enchufar todos los aparatos electrónicos a un multitoma de alimentación y apagarlo cuando se haya terminado de usar la pc.

- Usar una pc portátil en lugar de una desktop. Las portátiles suelen consumir menos energía.

- Cerrar las aplicaciones y apagar el monitor cuando no se necesita.

- Usar un medidor de potencia para saber cuánta energía consume realmente la pc y poder calcular el ahorro efectivo.

- Programar varias combinaciones de energía según los distintos modelos de utilización. Por ejemplo, se puede crear una combinación de energía para reproducir CDs de música con la que se apaguen inmediatamente el disco duro y el monitor, pero sin que el sistema quede nunca en modo de suspensión.