El ministro de Salud bonaerense, Claudio Zin, le pidió ayer la renuncia a Sebastián Marotz, titular del Laboratorio Central de Salud Pública Tomás Perón. Desde La Plata, el ministro le aclaró a este diario que el desplazamiento no tiene que ver con la causa relacionada con los medicamentos: “No le compramos nada a San Javier ni a ninguna de las droguerías cuestionadas, pese a que nunca la Justicia ni ninguna otra instancia elaboraron un listado de empresas sospechadas o acusadas”, le dijo Zin a Página/12. En principio, Marotz se había comprometido a tener el Laboratorio Central en condiciones de producir medicamentos a mitad de año, pero los plazos no se cumplieron.

Marotz es el segundo funcionario desplazado esta semana. El primero fue Alberto Costa, subsecretario de Control Sanitario. El juez Norberto Oyarbide asegura que tiene escuchas telefónicas de diálogos entre Costa y el titular de la droguería San Javier, Néstor Lorenzo, en las que hablan de dinero, aunque por ahora no le imputó ningún delito. El abogado de Costa, Fernando Burlando, pidió su eximición de prisión, y el ex funcionario tuvo que poner como fianza su vehículo, un Escort 89, lo que demostraría su escaso nivel económico. De todas maneras, en los ambientes de las droguerías, Lorenzo era un hombre muy sospechado y tanto la entonces ministra Graciela Ocaña como Zin habían advertido que no se debía establecer ninguna relación con él.

En La Plata afirman que en los próximos días habrá más desplazamientos en el área de Salud, en el nivel de los directores provinciales. Parte de la movida será por fallas en la gestión y también se habla de recambios de algún funcionario relacionado con Costa.