Luego de cortar el domingo los accesos a los estacionamientos de las playas de Punta Mogotes, los distintos sindicatos de bañeros que nuclean la actividad en la costas marplatenses volvieron al piquete. Esta vez fue en el centro, en avenida Luro y España, frente al Ministerio de Trabajo. Allí hubo un principio de acuerdo por los reclamos de los guardavidas que trabajan en balnearios privados, aunque las aguas aún no están calmas y se pasó a un cuarto intermedio hasta el lunes que viene, para solucionar el conflicto salarial. Los guardavidas privados reclaman el 8 por ciento que los diferencia de sus colegas municipales, que obtuvieron un aumento del 30 por ciento.

Según el ministro de Trabajo bonaerense, Oscar Cuartango, hasta la nueva reunión “se asegurará el servicio y no realizarán paros”. Los representantes del Sindicato Unico de Guardavidas de la República Argentina (Sugara) aceptaron un adelanto de dos mil pesos de parte de la Cámara de Empresarios de Balnearios de la República Argentina. Sin embargo, también está en discusión el pago de 15 días trabajados en noviembre. Así lo aclaró ayer Néstor Nardone, secretario general de Sugara.

Según le explicó a este diario Mario Fernández, bronceado, en cueros y bermudas como los demás manifestantes, están molestos porque se esperó hasta último momento para encarar la negociación salarial. “Si el tema no se soluciona la semana que viene hacemos paro, hasta ahora estuvimos en estado de alerta y movilización.”