“Cuando los medios empiezan a instalar hipótesis de lo que está trabajando la policía, también los delincuentes saben lo que se está haciendo”, advirtió Nilda Garré, ministra de Seguridad de la Nación, que cuestionó el accionar de los medios de comunicación en el caso Candela.

También sostuvo que quienes llevan la investigación deberían preservar una gran “cerrazón de la información” y agregó que habría que tener cuidado con las “declaraciones imprudentes, aun de los propios familiares que dicen que ‘están rodeados’”.

En cuanto al audio de la llamada telefónica que se filtró a los medios, dijo que “tendría que haber habido mucha rigurosidad: sorprende que los medios tengan una información como ésa, y no creo que haya ayudado en la investigación”.

“Hoy estamos en el debate de que podría tratarse de una venganza, atento a la situación de miembros de la familia que tienen condenas penales por delitos graves, incluso de crimen organizado”, señaló la ministra. Agregó que se hizo “un enorme esfuerzo” e insistió en que estos casos deberían manejarse “más reservadamente”. Advirtió que “todavía está todo muy oscuro como para poder emitir opinión”.

En cuanto a la reunión de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner con Carola Labrador, la madre de Candela, destacó que “la Presidenta es una madre y tiene toda esa sensibilidad de comprender”, y comentó que se trató “de un consuelo humano”.