Por R. K.

La investigación del caso Blumberg incuba otra polémica relacionada con los detenidos que existen en el caso. Fuentes inobjetables le dijeron a Página/12 que uno de los detenidos es Jorge Daniel Sagorsky, un hombre conocido como reducidor de autos y con claros vínculos con policías federales. Según los investigadores, sería el dueño –aunque no está a su nombre– del celular desde el que se hicieron llamadas para negociar con el padre de Axel. En fuentes de la Policía Federal dudan mucho de esta pista y creen que se trata de una maniobra de la Bonaerense. El otro detenido es Gustavo Arroyo, alias El Lolo, quien fue apresado por la SIDE en las inmediaciones de la zona en la que se produjo el tiroteo. Se le hizo una prueba de parafina para ver si había disparado recientemente y dio positiva.
“Sagorsky está sospechado de tener que ver con la banda, con el celular del que se hicieron las llamadas y posiblemente la organización haya querido entregarle el Passat blindado para que lo convierta en dinero”, le explicó un investigador a este diario. El Volkswagen Passat es el auto que le quitaron al empresario Guillermo Ortiz de Rosas, de Arcor, y en el que supuestamente iban los secuestradores a cobrar el rescate cuando se tirotearon con la Bonaerense y con efectivos de la SIDE.
Sagorsky es conocido como reducidor de autos y siempre se lo vinculó con hombres de uniforme. Es más, en la Federal consideran que su detención es “carne podrida” y una maniobra de la Bonaerense para echarle la culpa a la Federal. Los investigadores sostienen que el celular desde el que se hicieron las llamadas no estaba a su nombre, pero que fue de él. Y, además, insisten en que la banda le iba a entregar el Passat para reducirlo. Esto último no parece demasiado lógico, ya que los reducidores tienden a escaparle a algo tan manchado en sangre y secuestro como ese vehículo. Aun así, los investigadores le apuntan a Sagorsky y en la fiscalía afirman que “si está detenido, por algo es”. En los cruces de llamadas, además, hay vinculaciones de Sagorsky con Alejandro Monjo, un agenciero de automóviles, también hombre relacionado con la Federal, y que en su momento fue investigado porque fue el primer comprador de la Trafic que estalló en la AMIA.
Respecto de Arroyo, se lo sindica como integrante de dos bandas con antecedentes de secuestros, lideradas ambas organizaciones por delincuentes con seudónimo de animales: El Lagarto y El Oso. El punto clave por el que está detenido es que se transportaba en remise muy cerca de donde se produjo el tiroteo entre policías y quienes iban en el Passat, lo que a su vez era cerca del lugar donde se iba a iniciar la posta para el pago del rescate. La SIDE, actuando por orden judicial, detuvo a Arroyo y le hizo la prueba de parafina para ver si había disparado recientemente. El resultado fue positivo, por lo que está detenido para ver si integraba el grupo que iba en el Passat o estaba a punto de cobrar el rescate.