Tras las dos primeras jornadas de recolección de firmas que impulsan los familiares de víctimas de la tragedia de República Cromañón para convocar a un plebiscito revocatorio, el jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra, y los principales dirigentes de la oposición definirán esta semana sus estrategias. La idea es que entre hoy y mañana un conjunto de organizaciones cercanas al ibarrismo presentarán un pedido al Tribunal Superior para ser autorizados a recolectar firmas para el referéndum.
En tanto, Izquierda Unida anunció ayer el lanzamiento de una campaña pública para convocar a la población porteña a no firmar el plebiscito que determinará la continuidad del jefe de Gobierno. “No es democrático sino una trampa política. Ibarra quiere hablar de votos y encuestas para eludir su responsabilidad en la masacre”, aseveró Vilma Ripoll, ex legisladora de esa fuerza.