Sobre la base de las declaraciones previas de Ratzinger no existe una expectativa de que se puedan producir cambios con respecto a la postura del Vaticano en relación con la reproducción en general y la clonación en particular. Parecería que se van a mantener las condenas a la clonación terapéutica y con fines reproductivos. Sería preferible que en los países como la Argentina, estos debates no se lleven al terreno de la fe, sino hacia los fundamentos científicos y biológicos, que los gobiernos tomen sus decisiones pensando en el bien común de los habitantes y no en los mandatos de la Iglesia. En países como el nuestro, la posición de la jerarquía católica ha pesado mucho y su influencia ha sido negativa, por ejemplo, en temas como la educación sexual, que tiene una notable incidencia en la salud de la población y especialmente de los más jóvenes: la Iglesia Católica ha presionado sobre los legisladores para que voten en contra.

* Presidente de la Agencia de Promoción Científica y Tecnológica.