Carlos Broitman, abogado de tres de los jóvenes acusados, anunció que a partir del informe pedirá el sobreseimiento de sus defendidos imputados por el fallecimiento de Matías, a quienes la jueza María Salgueiro ya les había dictado la falta de mérito. “La verdad objetiva es que Bragagnolo no murió por una patota asesina y mis asistidos no tuvieron ningún tipo de participación” en su fallecimiento, aseveró. En el mismo sentido sostuvo: “Mis tres defendidos colaboraron con la Justicia y los amigos de Matías los señalaron, en rueda de personas, como quienes asistieron a Bragagnolo cuando éste se descompuso”. La junta médica estuvo integrada por ocho profesionales de la Universidad de Buenos Aires, y no contó con la participación de los peritos de parte. “Independientemente de que, contrariando la orden que dio la Cámara, no pudo participar ningún perito de parte, esta junta de notables llegó a una conclusión unánime de que el deceso de Matías fue por muerte súbita, no producto de un homicidio, de golpes ni una supuesta concatenación de hechos”, resaltó el letrado, eufórico con el resultado del informe. Broitman afirmó que el resultado descarta la posibilidad de una muerte violenta porque ese término “puede significar muerte accidental, homicidio, suicidio. Aquí fue una muerte súbita”.