Carlos Canavese, de la asociación civil de sobrevivientes Cambiar esta Realidad, y su hijo Guillermo escriben un boletín con novedades en torno del tema Cromañón que distribuyen por correo electrónico. Guillermo tiene 25 años y estuvo internado 22 días muy grave en el Hospital Fernández tras el incendio del boliche. Hasta el 6 de enero de 2005 estuvo en coma. Canavese está tratando de hacer un censo de las personas que vivieron la catástrofe: de los 4000 que se estima que estuvieron ahí, pudieron contactar por e-mail, personalmente o a través de alguna institución sólo a 1800. Canavese se pregunta: “¿Dónde están los 2200 restantes?”.