Después de un mes de incertidumbre, los alumnos del Instituto Saint Jean, de Villa Urquiza, y sus padres saben que el colegio no irá a remate y continuará con el dictado de clases. Anoche, en una asamblea, se desplazó al rector y a la comisión directiva de la entidad –una asociación civil sin fines de lucro– y se designó a una nueva conducción para manejar los destinos de la institución.

En la asamblea participaron los socios de la asociación civil, que son docentes del establecimiento, un veedor de la Inspección General de Justicia, y el legislador porteño Diego Kravetz, con experiencia en la resolución de conflictos en empresas recuperadas.

Según explicó Kravetz a Página/12, se logró negociar con los acreedores la suspensión del remate, destinado a levantar la hipoteca que pesa sobre el edificio. Anoche fueron separados el rector del colegio y la comisión directiva de la institución; se reformó el estatuto y se eligió una comisión directiva, que tendrá el apoyo de los padres para sacar adelante el colegio.

La continuidad del colegio estaba en riesgo porque para levantar la hipoteca, las anteriores autoridades estaban pensando en vender dos sedes. “Ahora no se va a vender nada, y la continuidad del colegio está garantizada.