Con un 45 por ciento de crecimiento en el volumen de facturación, el comercio electrónico continuará afianzándose durante este año en la Argentina, exhibiendo así el avance de la conectividad y del consumo interno durante los últimos años. Esta variación, difundida a comienzos por la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE), se encuentra en consonancia con el exponencial aumento de esta modalidad de comercio durante los últimos años. Según un estudio realizado por la consultora Prince & Cooke, entre 2007 y 2012 esta modalidad de comercio creció 539 por ciento, generando en el último año 120.000 puestos de trabajo, gracias a las compras de más de diez millones de consumidores, quienes movieron alrededor de 20 mil millones de pesos.

Según señala a Cash la presidenta de CACE, Patricia Jebsen, entre los motivos por los que los consumidores se inclinan por el comercio electrónico, un 55 por ciento lo hacen por “la comodidad”, un 28 por ciento para “ahorrar tiempo”, y un 23 por ciento debido a que “encuentran productos o servicios más económicos”. También, cita como causas para el continuo crecimiento, “el acceso a banda ancha, la venta de computadoras o dispositivos de conexión, una mayor cantidad de empresas vendiendo a través de Internet y una mayor bancarización de los clientes, entre otros factores”. Jebsen señala el hecho de que en el 2000, sólo el 14 por ciento de los argentinos de clase media y media baja consumía por medio de Internet, y en 2012 ese porcentaje llegó al 56.

De acuerdo a ese informe, otros motivos para este auge tienen que ver con el fuerte incremento de la conectividad durante los últimos años, ya que los usuarios de Internet se incrementaron de 3,7 millones en 2001 a 31,1 millones en 2012; la creciente seguridad y conocimiento en las transacciones electrónicas, que motivó que del diez por ciento de los internautas que hacían compras en línea en 2001 se pasó a un 32 en 2012, y el constante aumento de las empresas que ofrecen sus productos y servicios por este medio, que en el caso de las pymes alcanza al 32 por ciento del total, fundamentalmente en los rubros de pasajes y turismo; electrónica y computación; supermercados y entradas para eventos, en ese orden.

Para comprender esta continua expansión, ha sido esencial el fuerte consumo interno motorizado en el país durante los últimos años, debido a paritarias que igualan o superan los diferentes índices de inflación, así como a las elevadas posibilidades de créditos personales. Este fuerte consumo interno es de hecho una de las razones por las que, aun cuando el comercio electrónico creció en todo el mundo –superando por primera vez el billón de dólares–, nuestro país estuvo por encima del promedio en términos porcentuales. Según la asociación Ecommerce Europe y la consultora GFK, la región europea, –que a partir de 2010 superó a Norteamérica como el mayor mercado de comercio electrónico–, tuvo un crecimiento del 19 por ciento en 2012. De acuerdo a la consultora norteamericana eMarketer, el comercio electrónico creció en total un promedio de 21 por ciento en 2012, estimando que este año lo hará un 18. Para Latinoamérica, esa consultora proyecta que entre 2011 y 2016 la Argentina tendrá un 84 por ciento de incremento de consumidores por comercio electrónico.