¿Está de acuerdo con la reforma previsional teniendo en cuenta que el Banco Provincia participa de la AFJP Orígenes?

–Tengo discrepancias. A menos que el sistema previsional contemple los problemas que existen en el mercado laboral, las soluciones no son completas. Hay una gran injusticia en el sistema. Gran parte de la recaudación de la Anses es de rentas generales. Un desocupado, por ejemplo, no hace aportes pero cada vez que hace una compra y paga el IVA financia una parte de la jubilación de otra persona. Tal vez, un jubilado de privilegio. Es una gran injusticia, porque además el desempleado ni siquiera tendrá una jubilación. La única forma de incorporar a esa gente en el sistema es que sea progresivo. Que el que gana más cobre menos al momento de jubilarse, y el que menos gana se asegure una mejor jubilación. No importa si se está en el Estado o en una AFJP. La última reforma da libertad pero no termina de resolver el tema de los excluidos. Es incompleta. Le falta una fase más.

¿Pero está de acuerdo con la posibilidad de que el trabajador que aporta a una AFJP pueda volver al Estado?

–El sistema de capitalización en la Argentina no tiene ningún sentido. Un país que tiene un porcentaje importante de desocupados y de trabajadores informales no puede tener una ley de jubilación privada tan estricta. Creo que volver a darle importancia al sistema de reparto es un paso hacia la solución definitiva. Hasta los países anglosajones tienen sistemas de jubilación pública más balanceados. En Estados Unidos no se cobra en relación a lo aportado. Es un sistema que iguala mucho. Y en Australia es igual para todos.