“En un relevamiento sobre 233 empresas nos encontramos con que 170 tenían problemas de abastecimiento. En 60 casos se trata de insumos importados que no pueden comprar porque no les permiten girar las divisas al exterior. En los otros 90 casos se trata de insumos producidos y comercializados en el país por grupos económicos extranjeros y nacionales que se abusan de su posición dominante en el mercado. Algunos subieron los precios hasta un 400 por ciento. La mayoría directamente dolarizó sus precios. Otros directamente no entregan mercaderías esperando que el dólar siga aumentando. En todos los casos están exigiendo pago por adelantado o contra culata de camión en dólares. Las pymes se encuentran con que tienen que comprar insumos a precio dólar al contado y venderles sus productos a las cadenas de hipermercados al mismo precio que antes o con mínimos aumentos y cobrar a 120 días. En la mayoría de los casos las pymes no pueden elegir. Por ejemplo, o le compran los laminados de acero a Siderar pagando dólar billete a precios actualizados o no tienen a quién comprarle y tienen que cerrar sus empresas.”