Creada en Francia en 1984 con la idea de trabajar en pos de la transformación social a través del arte, Black, Blanc, Beur, la compañía que dirigen Jean Djemad y Christine Coudun, ofrecerá sólo dos funciones de su espectáculo T’es trois en la Ciudad Cultural Konex. La visita del grupo compuesto por 18 intérpretes que fusionan hip hop y danza contemporánea se produce en el marco de un intercambio con Crear Vale la Pena, agrupación que lidera la coreógrafa Inés Sanguinetti, comprometida en la misma tarea de inclusión social, quien presentó su espectáculo Argentina es afuera el fin de semana pasado en la misma sala.

La compañía comenzó a funcionar en un estacionamiento subterráneo de la ciudad de Saint Quentin en Yvelines, en las afueras de París. Desde que Djemad se asoció con Coudun pensaron en desarrollar un proyecto artístico en esa ciudad creada a partir de la inmigración, tan nueva por entonces que sus habitantes no tenían todavía “una memoria de haber vivido juntos y de haber hallado modos de superar diferencias y particularidades de cada grupo hacia el entendimiento. Es decir, que no tenían ninguna de las cosas que permiten a las personas vivir en sociedad”, detalla el director en una entrevista con Página/12. A esta altura ya han pasado por sus talleres más de 200 intérpretes, muchos de los cuales tienen sus propios grupos que trabajan en la misma perspectiva. Pero a pesar de sus 22 años de existencia, Black, Blanc... recién puede afirmar en los últimos tiempos que cuenta con el reconocimiento de las instituciones públicas francesas. “Hemos presentado nuestros espectáculos en todo el mundo –resume Djemad–. Trabajamos en los lugares más infames (de ellos guardo los recuerdos más preciados), pero también en los teatros de mayor prestigio.” Las funciones serán mañana a las 21 y el domingo 10, a las 19, en Sarmiento 3131.

–Los integrantes de la compañía pertenecen a minorías étnicas. ¿Cuál es la posición política de este grupo que trabaja en los márgenes de una ciudad como París?

Jean Djemad: –Lo político en nosotros está puesto en relación con lo estético y también con lo ético. Queremos generar un discurso de inclusión social desde el deseo de bailar y de crear. El arte es el principio activo de esta posición política. A partir del placer de danzar se construye un modo de vivir y de estar con los otros. En el desarrollo de nuestra tarea se distinguen, por un lado, el proceso y por otro, la creación en sí misma. Ese trayecto tiene que ver con el conocerse, el descubrir las propias raíces y también con el reconocimiento que implica la mirada del otro.

–¿Cómo se difunde el hip hop en Francia?

–El hip hop es producto del fantasma de lo africano que persiste en la mente de los afroamericanos. Es también la continuación de la lucha por la obtención de los derechos cívicos de los negros en Estados Unidos. En Nueva York, a mediados de los años ’70, un hombre llamado Africa Bombata fue quien conceptualizó el hip hop, vinculándolo con la energía positiva de la música y la danza, en oposición con la violencia de la lucha entre pandillas. Fue a partir de un programa de televisión de 15 minutos de duración que se emitió en Francia cada domingo, que los jóvenes negros vieron bailar hip hop. De allí en adelante, cualquier superficie plana en la ciudad fue lugar de prueba y práctica.

–¿Cuál es el significado del nombre de la compañía?

–Significa, en el argot francés, negro, blanco y árabe, y es una ironía sobre los tres colores de la bandera francesa. Recuerda el momento en que el presidente De Gaulle les pide a los integrantes de las comunidades que no eran consideradas ciudadanos que luchen por la patria: “Si mueren por Francia tendrán el mismo status cívico que los nacidos en el país”, les dijeron, pero siguieron siendo considerados una minoría, a pesar de los sacrificios. Hoy, negros y árabes están viviendo otra realidad, porque hay una revalorización de lo propio pero no para confrontar. Hoy se busca la integración de la diversidad, desde el conocimiento de la historia de cada grupo.

–¿Qué opinión tiene de los sucesos ocurridos en París el año pasado, protagonizados por representantes de minorías?

–En esta coyuntura política hay quienes quieren sacar provecho de algún conflicto que pueda aparecer entre los representantes de minorías para generar terror en los ciudadanos que quieren vivir bien tranquilos. Autos quemados hubo siempre, y bajo todos los gobiernos. La estrategia de algunos consiste en fabricar temor para reinar.