CULTURA › EVA PERóN, EJE DE MúLTIPLES INQUIETUDES ARTíSTICAS
Mañana se cumplen 60 años de su muerte. La danza, la plástica, el teatro y la literatura le rinden homenaje a través de un puñado de autores que les escapan a los clichés y a los prejuicios.
› Por Paula Sabatés
Si el arte y sus distintas disciplinas se han encargado de retratar a las personalidades más destacadas de todos los tiempos, María Eva Duarte de Perón no podía ser la excepción. Su juventud, su matrimonio, sus pasiones, su vida política, su muerte, todos los aspectos de su vida se convirtieron en objeto de representación. Los primeros en demostrar al mundo la iconicidad de esta mujer que marcó la historia del país fueron Andrew Lloyd Webber y Tim Rice con su emblemático musical Evita, que hoy protagonizan en Broadway Elena Roger y Ricky Martin. Desde entonces ha habido siempre producciones artísticas que la abordan como sujeto. A 60 años de su fallecimiento (que se conmemora mañana), la literatura, la danza, la plástica y el teatro (el cine se ocupó de ella el año pasado, con los estrenos de Eva de la Argentina y Juan y Eva –película esta última que el próximo domingo saldrá con la edición de Página/12–) la siguen tomando como eje de sus obras. Aquí, un recorrido por las más actuales.
20.25. Quince mujeres hablan de Eva Perón es el nuevo libro de la escritora cordobesa Lilia Lardone, recientemente editado por Sudamericana. Reúne el testimonio de mujeres de distintas corrientes de pensamiento político y clase social que recuerdan la noche en la que Evita pasó a la inmortalidad, y cómo ésta las marcó de por vida. “La pregunta sobre qué hacía cada una el 26 de julio de 1952, usada como disparador, logró que las mujeres expresaran opiniones y datos concretos sobre las costumbres, ideologías, pasiones y rumores de una Argentina que ya no existe”, cuenta la autora a Página/12.
Sobre la relación entre la historia y la literatura, Lardone afirma que ésta “ha aportado muchos libros que iluminan hechos históricos bajo otros ángulos”, y cita como ejemplo la novela Santa Evita, de Tomás Eloy Martínez, y el poema Eva Perón en la hoguera, de Leónidas Lamborghini. Pero agrega: “Creo que lo ficcional se relaciona sólo tangencialmente con la historia; más bien se apoya en la subjetividad”.
Otra de las novedades editoriales es Evita. Jirones de su vida, la primera biografía del historiador Felipe Pigna. Publicada por Planeta, presenta a Eva en toda su complejidad, desde su infancia hasta su transformación en una de las personalidades de mayor trascendencia política, y también después de su muerte. Con documentación y testimonios de gente que la conoció, el libro se encarga de describir en profundidad los años del surgimiento de Eva como figura política, la consolidación del peronismo, su caída y proscripción y lo que dejó el movimiento hasta hoy en día.
“Es importante en este aniversario aportar algo al debate. Con este libro no busqué la novedad ni tampoco una primicia rutilante, sino hablar de Eva como sujeto histórico protagónico de la historia y no como un apéndice de Perón o como un personaje folklórico, como un mito. Porque así es como habla la oligarquía de los personajes populares y de ese modo bloquea todo análisis y toda comprensión”, sentencia Pigna.
De la mano de la editorial Del Nuevo Extremo, la artista plástica Nora Iniesta se suma a la oleada de publicaciones sobre la emblemática primera dama con su libro Evita. La dama de la esperanza, que lleva ese nombre por el prólogo homónimo que escribió especialmente Antonio Cafiero para la ocasión. Se trata de la compilación de más de doscientas imágenes con toda la iconografía de Eva Perón realizada por la artista, que la retrata en situaciones imaginarias y en diversos paisajes de todo el país.
“Como el arte, Evita no tiene fronteras. Es algo distinto al peronismo y a Perón. Es una mujer omnipresente y así la trabajo siempre”, cuenta Iniesta, que viene trabajando sobre el tema desde hace casi veinte años. “Eva es parte importantísima de mi infancia. De chica me crié en Lomas de Zamora, un barrio en donde ella era una especie de hada madrina, intangible para mí, pero real. Por eso, lo que hoy aporto es memoria. Y creo que es muy importante porque con memoria un país no repite situaciones.”
En teatro, a Eva también se la ha retratado sistemáticamente. Además del musical que la hizo famosa en todo el mundo ha habido en la Argentina innumerables puestas que retomaron su figura, varias de las cuales ya no están en cartel pero se presentan esta semana especialmente y por única vez con motivo del aniversario de su muerte. Tal es el caso de Eva Perón en la hoguera, protagonizada y dirigida por Cristina Banegas, que se presentó anoche en el Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti, o de No trates de ser Eva, de Marina Assereto y Micaela Daniela Suárez, que se presentará mañana en el Centro Cultural Paco Urondo.
Entre las que sí están en cartelera en este momento está Bastarda sin nombre (sábados a las 21 en Espacio Abierto, Pasaje Carabelas 255), escrita por la dramaturga Cristina Escofet y dirigida por Javier Margulis. El unipersonal protagonizado por Roxana Randón es un biodrama que comienza antes incluso del nacimiento de Evita y retrata los momentos más conocidos de su vida, haciendo foco en su condición de hija ilegítima.
Escofet, que fue a la misma escuela que Evita y dice que su historia le “pegó desde muy chica”, afirma que escribió esta obra porque “no hay una mujer como ella en la historia del mundo”. Tuvo suerte: Bastarda sin nombre fue seleccionada para ser la primera obra de teatro que se presenta en el Salón Blanco de la Casa Rosada. “Que los que diseñan las políticas públicas puedan ver los signos de la memoria en una obra es muy importante porque significa que los dramaturgos, los directores y los actores también escribimos la historia.”
También en cartel, los domingos a las 21 en Espacio Liberarte (Corrientes 1555) se puede ver Inevitable. Pasión y muerte de Eva Perón. La obra escrita por Carla Mitre y dirigida por Gabriel Devoto, ambos integrantes del grupo independiente Barabake, es la primera de una trilogía sobre Evita y repasa su vida desde 1946 hasta su muerte, poniendo de manifiesto la pasión y el sufrimiento con los que vivió durante esos años. Con dos Eva en escena, una que yace en su lecho de muerte y otra que transita sus años más vitales, la obra recorrió varios provincias y municipios de Buenos Aires.
“Lo que pasa con Evita es único. Es un personaje que no le es indiferente a nadie. Fue realmente la Abanderada de los Humildes, la más fiel representación de un pueblo. Por eso nuestro público es variado. No ven la obra solamente quienes la aman, sino todos aquellos que quieren acercarse a ella en profundidad”, sostiene Devoto.
Saliendo del teatro y la literatura, Eva, un recorrido se presenta como una de las alternativas más atractivas para recordar a la “Jefa Espiritual de la Nación”. Se trata de una intervención coreográfica creada y dirigida por Andrea Castelli, que se podrá ver los viernes de agosto y septiembre a las 21.30 en el mítico Museo Evita, ubicado en Lafinur 2988. Además de conmemorar el 60º aniversario del fallecimiento de Eva, la performance celebra los diez años de creación del museo.
Invitados por un elenco de actores y bailarines, cuarenta espectadores por vez serán conducidos por las diferentes salas del museo para presenciar una peculiar visita guiada atravesada por cuadros coreográficos. Se utilizarán tangos, valses, milongas y foxtrot y versiones de marchas y cantos populares dedicados a Evita. “La idea es la del museo vivo. Nuestro trabajo consiste en combinar la danza, que es movimiento puro y efímero, con lo estático del edificio y lo permanente del museo; aprovechar lo que el espacio brinda”, dice Castelli. Y cuenta que la emoción que se produce es tal que “hasta los bailarines lloran en los ensayos”.
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