La sala teatral Luisa Vehil corre peligro de desaparición. Para su salvataje, hoy a las 19 se realizará una cruzada solidaria en su sede de Hipólito Yrigoyen 3133. Rubén Hernández y Leonardo Martín Dattoli, actores y herederos artísticos de la fundadora del espacio, Luisa D’Amico, intentarán vender 80 mil entradas a precios populares para futuras funciones. Lo que temen es que el legado artístico y cultural de D’Amico se pierda ante algún desacuerdo con los herederos materiales de la propiedad ante la inminente resolución de la herencia. El Luisa Vehil fue declarado Patrimonio Cultural de la Ciudad de Buenos Aires, pero podría “terminar como un supermercado o templo evangélico”, advierten Hernández y Dattoli.