Nadie se ocupó tanto de las cuestiones del poder y de su ejercicio como Carl Schmitt. El destacado jurista y pensador alemán fue funcionario del régimen nazi durante los primeros tres años, pero luego fue desplazado por la SS. Estuvo detenido en un campo de prisioneros entre 1945 y 1947 y declaró en el Juicio de Nuremberg. Allí habló sobre “la concentración extrema de todo el poder en las manos de Hitler”. El libro Diálogo sobre el poder y el acceso al poderoso (FCE), fue definido por Schmitt como una prolongación de las reflexiones de Nuremberg. El texto está concebido en forma de diálogo entre un hombre sabio y un joven estudiante sin experiencia. Que representa, según Schmitt, la dialéctica que se establece entre los individuos que tienen poder y aquellos que carecen de él.