Marginalidad social, división étnica y políticas de Estado son los ejes del último libro de Loïc Wacquant, Las dos caras de un gueto (Siglo XXI). Con una perspectiva teórica y comparada sobre las metrópolis del Primer Mundo, Wacquant construye un concepto de “gueto” como instrumento de segmentación y control. Asimismo analiza cómo el neoliberalismo implicó la administración penal de quienes quedaron excluidos de la sociedad de mercado. Lo hace vinculando dos tendencias que considera centrales en la desigualdad contemporánea: marginalización y penalización.