El disco está en crisis. Se sabe. Y es bastante difícil que no lo esté si, encima, no hay dónde ni cómo comprarlos. En los repertorios menos comerciales, los sellos grandes han abandonado casi del todo cualquier intento de distribución en la Argentina y los pequeños no cuentan con nadie que se ocupe de venderlos en estas tierras. En el ámbito del jazz, Minton’s, en la Galería Apolo, ocupa el lugar de solitario paladín. Y en el de la música llamada clásica, al lado del panorama local El Sahara parecería una selva. La solución, se piensa, es Internet. Están los torrents y las bajadas gratis, por supuesto. Pero no siempre está allí lo que se busca y muchas veces lo que aparece lo hace sin la resolución sonora requerida. También existe, con una resolución sonora bastante pobre, Spotify, que cumple adecuadamente con la función radio Spika con música de fondo permanente. Pero hay un público que, créase o no, todavía está pendiente de las novedades discográficas y busca tenerlas con la mejor resolución sonora posible. ITunes ofrece a la venta –con precios que rondan los diez dólares tarjeta– casi todo el material editado, aunque en la mayoría de los casos, sin ninguna información relativa (si bien en los últimos meses varios sellos han comenzado a adjuntar los folletos de sus discos en PDF). No todo está subido con el mismo cuidado, por otra parte. Hay fuentes de origen realmente muy malas y, en todos los casos, el sistema m4a, que es el elegido, implica una compresión de la señal aunque, en este caso, es selectiva (a diferencia del MP3) y comprime los silencios y los pianissimos y no los momentos con intensidad media o superior (que es donde podrían aparecer las saturaciones). En el campo de la música de tradición académica, por otra parte, existen algunas opciones que permiten bajar los discos en FLAC 16 bits (sin pérdida alguna respecto del CD) y hasta en 24 bits (con la resolución del master). El sello inglés Hypèrion ofrece todo su catálogo con esta modalidad, por ejemplo, y la página www.eclassical.com tiene a la venta todo lo publicado por sellos como Bis, Harmonia Mundi o Naxos con opciones para descargarlo en MP3, FLAC-16 bit o, en algunos de los discos más nuevos, FLAC 24-bits, dando la opción, en casi todos los casos, de la descarga del folleto en PDF. Muchas productoras pequeñas, como One Little Indian, que publicó el último disco de Björk, también permiten la compra directa de la descarga y algunos músicos de jazz y rock independiente ofrecen la compra de sus producciones desde sus propias páginas de la red y a través de lugares como bandcamp.