Todavía no tiene un lugar físico y los papeles recién empiezan a acomodarse, pero ya es una realidad: tras la aprobación del Ministerio de Trabajo quedó oficialmente constituido el Sindicato Argentino de Autores, una entidad muy esperada por autores de teatro, cine, radio, televisión, nuevas tecnologías, autores coreográficos y compositores musicales. Se trata de la entidad gremial que velará por sus intereses, que ellos mismos reconocen como “muy vulnerados”. Por eso en el acto celebratorio que se llevó a cabo en el Teatro del Pueblo (sede donde eventualmente está trabajando el flamante sindicato hasta definir su espacio definitivo), en el que se celebró este nacimiento, hubo cientos de autores agrupados para dar su apoyo, y también para elegir a la Comisión Directiva, que estará formada por diversas personalidades del campo autoral.

Los autores ya contaban con la Sociedad General de Autores de la Argentina –más conocida como Argentores–, una organización dedicada a la administración y protección de los derechos de autor de dramaturgos, guionistas y escritores de espectáculos escénicos, audiovisuales y multimedia, además de compositores musicales y autores coreográficos. Pero la misma es una Sociedad de Gestión (como en música es Sadaic, por ejemplo), que puede actuar únicamente cuando ya existe la obra, y no antes o después de su creación. En cambio, un sindicato tiene poder de acción cuando la obra está siendo escrita, y por su categoría legal es el único organismo que puede defender los derechos laborales de los trabajadores del rubro (Argentores no podría, por ejemplo, llamar a una huelga o negociar paritarias). De modo que la constitución del organismo significa, para los autores, la herramienta para discutir sus condiciones de trabajo.

“La del sindicato es una idea que muchos de nosotros tenemos hace tiempo. Lo único que teníamos en defensa del autor era Argentores, que fue una buena herramienta pero no puede intervenir en determinados asuntos”, señala a Página/12 Oscar Tabernise, autor y flamante secretario general del sindicato, que opina que éste no se conformó antes porque los autores son “personas particulares, que realizan su actividad en solitario, y a las que a veces les falta reunirse para sumar consenso”. Para él, la situación del autor en la actualidad es de “involución”, en el sentido de que han “perdido derechos”. Lo mismo que señaló el pasado 15 de septiembre Miguel Angel Diani, presidente de Argentores, en la ceremonia de entrega de premios a la producción autoral 2014 que se celebró en el Piazzolla Tango. Allí el dirigente se había comprometido con “la lucha por lo justo” y la “defensa de derechos”, remarcando la mala situación de los trabajadores del rubro.

“El problema empieza a partir del avance fuerte de las productoras y los grupos dueños de los medios de comunicación. Está esta idea de que el autor, como es dueño de su obra, no es un trabajador, cosa que es una mentira, porque somos trabajadores como cualquiera, solo que con ciertas características particulares, como eso de que trabajamos sobre obras sobre las cuales tenemos los derechos”, sostiene Tabernise. “Fuimos retrocediendo en nuestras condiciones de trabajo y en nuestros salarios y por eso era necesaria una herramienta como ésta, que es una realidad en muchos otros países”, asegura.

Entre las diferentes disciplinas, el dirigente señala que el mayor problema se observa en la rama audiovisual, y sobre todo en la televisión (aunque en otras áreas también hay reclamos puntuales). “No es que como autor de telenovelas, por ejemplo, hacés una obra y ya está. El autor está reescribiendo constantemente en función de pedidos de los productores, y ese es un trabajo que ninguno de ellos reconoce. Por otro lado, también pasa que muchas veces nos piden que presentemos un proyecto para el cual invertimos mucho tiempo. Y si no sale no cobramos un peso”, explica. “Hace varios meses que venimos negociando con productoras como Telefe, Underground y Endemol. Hoy nos encontramos cediendo la obra a perpetuidad y eso no puede ser. La obra debe volver al autor pasado un plazo determinado de tiempo, y él autorizará a la productora a vender nuevamente sus guiones y ser socios en las ganancias”, había denunciado Diani por su parte en aquella oportunidad.

“Para todas estas cosas va a estar el sindicato. La idea es que Argentores siga trabajando y que este nuevo organismo sume una herramienta para ir por los dos lugares: el de continuar por la defensa del derecho de autor, en la que seguiremos insistiendo, pero además agregarle lo del derecho laboral, que hoy es lo más urgente”, cierra el secretario general, que en la Comisión Directiva estará acompañado por Diego D’Angelo, Pedro Patzer, Roly Santos, Patricia Maldonado, Tito Cossa, Adriana Tursi, Daniel Dalmaroni, Martín Salinas, Raúl Brambilla, Ricardo Rodríguez y Santiago Fernández Calvete, entre otros referentes del cine, la televisión, la radio, el teatro y la danza.