Desde hace años venimos recorriendo juntos el camino del crecimiento del sector en nuestro país. Fue un trabajo sostenido desde las políticas públicas y desde el sector privado. Nos guió la convicción de que el crecimiento de la producción y distribución de las producciones de empresas pymes y proyectos cooperativos, permitiría fomentar la diversidad, limitaríamos el poder de los monopolios que dominan el sector y abriríamos, con un federalismo real, la posibilidad de desarrollo de emprendedores en todas las provincias. Se hizo mucho en esa dirección, algunos ejemplos: los MICA (Mercados de las Industrias Culturales Argentinas) nacionales y provinciales; llevamos esta experiencia a Sudamérica, en el 2014, con el Micsur en el que participaron 10 países de la región. Apoyando a las pequeñas editoriales con la compra de millones de libros por parte del Ministerio de Educación; con el trabajo del Incaa sosteniendo la producción del cine nacional; el Instituto Nacional de Teatro sosteniendo salas y elencos en todo el país. La exitosa presencia del país en ferias internacionales las del libro en Frankfurt, París, Guadalajara, San Pablo o la bienal de Venecia, entre otras. El aporte en la capacitación y la infraestructura de los Ministerios de Trabajo, el de Industria y el de Planificación. En estos doce años ha estado todo el gobierno nacional y la mayoría de los provinciales defendiendo y estimulando a las industrias editoriales, de la música, la audiovisual, el diseño, los desarrollos de internet y videojuegos. Este fenomenal apoyo directo al sector se dio en el marco de políticas económicas que estimularon el consumo interno y regularon el ingreso de productos importados, a precios de saldos por la crisis internacional. Ese círculo virtuoso de políticas públicas con la participación del sector privado generó en estos años un crecimiento del sector de las industrias culturales que lo sitúa en el 3,80 por ciento del PBI y empleando a 500.000 personas. También las leyes promulgadas: la de Servicios de Comunicación Audiovisual, la del reconocimiento del cine como industria, las de los derechos de actores y directores, entre otras. Leyes que apuntan claramente a posibilitar la participación más diversa de las producciones nacionales en el consumo de los argentinos, abriendo espacios a nuevas estéticas y producciones que contrapesen la presencia de los productos de los grandes conglomerados nacionales e internacionales con su carga de colonialismo cultural, discriminación y violencia. Amigas y amigos, todo esto no es un folleto publicitario, ha sido nuestra cotidianeidad durante estos años. Hemos vivido el surgimiento y crecimiento de proyectos culturales en todo el país. También sabemos de las dificultades que tenemos que afrontar a diario, sobre todo para los productores provinciales. Pero una pelea en la que no se está solo en la que hubo un Estado activo, fomentando, compensando, regulando. Todo esto está en peligro. ¿Alguno de ustedes escucho a Macri, hablar de cultura?¿Se lo imaginan defendiendo al cine nacional?¿Alguien piensa que un eventual gobierno de esta Alianza de Derecha frenara los millones de libros de saldo que nos invadirán desde España?¿Lo ven defendiendo la Ley de Medios, y haciendo cumplir la cuota de producciones locales en los canales de televisión? ¿Lo imaginan fortaleciendo la integración regional, nuestro natural espacio de crecimiento? ¿Algún pequeño productor de las provincias, espera que vaya en su apoyo? Por supuesto sabemos que nada de eso está en sus planes. Sus planes son ajustar sueldos vía devaluación, abrir indiscriminadamente el mercado externo, reducir políticas activas dirigidas a la producción. Esto más temprano que tarde llevará a la desaparición de la mayoría de los pequeños productores. Ya lo hemos vivido: en los escenarios de ajuste lo primero que deja de consumirse son los productos culturales. Los convoco a defender lo conseguido, a seguir por este camino. Mejorando y profundizando las políticas hacia el sector. Seguir construyendo, no dinamitar lo conseguido.

* Ex director nacional de Industrias Culturales.