El camino de San Diego, de Carlos Sorín, obtuvo una mención especial de la crítica en el 28º Festival del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana. El jurado rescató la capacidad de reflejar la devoción hacia el ex futbolista argentino, un mito de “hondo arraigo social, que trasciende lo deportivo”. Por otro lado, en el mismo certamen, el último film de Alejandro Doria, Las manos, obtuvo el premio Vigía, que el año pasado se lo llevó Iluminados por el fuego, de Tristán Bauer. El jurado, presidido por José Antonio Méndez Valencia, otorgó el codiciado Vigía a la película de Doria “por el manejo de situaciones dramáticas, música, y el tratamiento de un tema complicado”.