Un juez de Los Angeles rechazó una demanda contra Robert De Niro, a quien la empresa aseguradora Fireman’s Fund acusó de haber ocultado que tenía cáncer de próstata al contratar un seguro en 2003 para la filmación de Mente siniestra. La empresa debió pagarle al estudio 1,8 millón de dólares por el retraso que sufrió el rodaje durante el tratamiento del actor: De Niro convenció al juez de que se enteró de su diagnóstico pocos días después de haber firmado el contrato con la aseguradora.