“Si el cine desempeña un papel tan importante en la mitología revolucionaria del ’68, es que ya había impregnado los espíritus. Los jóvenes que salieron a las calles como quienes sueñan con la revolución son, de alguna manera, tanto los hijos de la nouvelle vague como los del antiimperialismo.” Estas palabras del historiador y crítico de cine Antoine de Baeque dan una idea del marco teórico sobre el cual se desarrolla la retrospectiva “La imaginación al poder: mayo del ’68 / 40 años después”. Organizada por el Complejo Teatral de Buenos Aires y la Fundación Cinemateca Argentina –en colaboración con la Embajada de Francia, el Goethe-Institut y la Asociación DocBsAs–, la muestra que comienza hoy en la Sala Leopoldo Lugones del Teatro San Martín (Avenida Corrientes 1530) estará integrada por 23 films documentales y de ficción –la mayoría inéditos en Argentina– que dan cuenta no sólo del estallido político y social que conmovió al mundo, sino también de sus fundamentos intelectuales y sus consecuencias estéticas. Se verán materiales de Guy Debord, Helke Sander, Chris Marker, Harun Farocki, Hervé Le Roux, Alexander Kluge, JeanLuc Godard, Helga Reidemeister, Philippe Garrel y el Grupo Medvekine, entre otros.

Q Hoy abre el fuego Morir a los 30 años (Francia, 1982). A través del retrato emotivo de su amigo Michel Recanati, que se suicidó en 1978, el realizador Romain Goupil cuenta la historia de una generación marcada por el compromiso político y la militancia. Un film esencial para comprender el post ‘68.

Q Mañana va un programa múltiple. En Aullidos a favor de Sade

(Francia, 1952), la voz de Guy Debord –un pensador que se anticipó a muchas de las acciones políticas y estéticas del ‘68 anuncia que el cine está muerto y que es mejor pasar directamente al debate, pero el film sigue. Sobre el pasaje de algunas personas a través de una unidad de tiempo bastante corta (Francia, 1959), filmada en los bares de SaintGermaindesPrés, Guy Debord presenta a su grupo en esos años, con un discurso de enorme densidad poética y conceptual alrededor de la sociedad, el urbanismo y el arte. Crítica de la separación (Francia, 1961), también de Debord, ofrece un balance de una situación atravesada por la incertidumbre, comentario de una derrota provisoria. Los Cinétracts (Francia, 1968) son realizaciones colectivas, contranoticieros anónimos, pero en los cuales es evidente detrás de las cámaras la presencia, entre otros, de Chris Marker y Jean Luc Godard.

Q El domingo también va todo un minifestival. La sociedad del espectáculo (Francia, 1973), de Guy Debord, es la puesta en imágenes de su propio libro, un texto capital de la cultura revolucionaria del 68. En Refutación de todos los juicios, tanto elogiosos como hostiles, que fueron inducidos por el film “La sociedad del espectáculo” (Francia, 1975) Debord resume claramente su posición política, estética y personal. El matafuegos E.A. Winterstein (Alemania Federal, 1968), de Alexander Kluge , Fuego inextinguible (Alemania Federal, 1969), de Harun Farocki, y A quebrar el poder de los manipuladores (Alemania Federal, 1968), de Helke Sander, vienen a probar que el mayo del 68 no fue solo francés sino también alemán y que entre sus principales impulsores también había cineastas berlineses.

Q El lunes 5 es el turno de la obra maestra de Guy Debord, In girum imus nocte et consumimur igni (Francia, 1978), demoledora descripción de la vida del espectador de cine y su capa social de modernos esclavos, “asalariados pobres que se creen propietarios, ignorantes engañados que se creen instruidos, muertos que creen que votan”.

Q El martes 6 van dos films clásicos del período: Hasta pronto, espero (Francia, 1967), de Chris Marker, crónica del levantamiento obrero que sería el antecedente del mayo francés y el film que anticipó también a la concepción militante del cine que imperaría por esos años; y Clase de lucha (Francia, 1969), realización colectiva del Grupo Medvekine.

Q El miércoles 7 se verá En busca de Rudi Dutschke (Alemania Federal, 1988), de Helga Reidemeister, retrato del líder estudiantil alemán, cabeza de la “oposición extraparlamentaria”. El film incluye testimonios de la activista Ulrike Meinhof y el filósofo Herbert Marcuse, uno de los mentores del movimiento del ’68.

Q Y entre el jueves 8 y el domingo 11 se verán, entre otros, films fundamentales para comprender la época, como Regreso al trabajo (Francia, 1997), de Hervé Le Roux, y El fondo del aire es rojo (Francia, 1977-1998), de Chris Marker, un documento excepcional sobre la historia de la izquierda entre 1967 y 1977, con aportes de Simone Signoret, Yves Montand y Jorge Semprún, entre otros. Horarios y más información en www.teatrosanmartin.com.ar/cine