El Perrodiablo, Mostruo!, Pommez y Shaman, los cuatro artistas que tocarán hoy.
Fotos: Cata Moncal y Francisco Laxague.
Intervención: Emmanuel Orezzo

Nieva sobre Buenos Aires, después de 89 años. Es la madrugada del lunes 9 de julio de 2007 y la gente sale de sus casas para ver caer los copos. Todos festejan, todos menos Juan Salvo que, desde su ventana, junto a su familia y sus compañeros de truco, observa incrédulo cómo la nieve empieza a asesinar a los que quedaron allá afuera. Es la avanzada de una invasión, el comienzo de un final nefasto. Está claro que esto no fue lo que sucedió en 2007, pero un cruce de coordenadas de tiempo y espacio bien podrían haber devuelto a El Eternauta a ese día helado de julio. Flashes como éste sirvieron de inspiración a las 18 bandas independientes que participaron del disco Los Ellos, el primer homenaje en su tipo a la obra de Héctor Oesterheld y Francisco Solano López. Cuatro de esos grupos tocarán hoy desde las 21, en Niceto Club (Niceto Vega 5510), acompañados por una muestra de ilustradores y fotógrafos, en el marco de la presentación oficial del álbum, que también tendrá un documental.

“Mimnio... Athesa... Eioioio”, es el canto oscuro de un Mano (seres superdotados que comandan a los Cascarudos, en la historieta de Oesterheld), la última melodía antes de morir, solo y lejos de su planeta. Es curioso que hasta ahora nadie se haya preguntado seriamente cómo sonaba esa despedida, si era un grito apagado, un lamento, una lírica dulce dicha al oído. Para Juan Ibarlucía, de Pommez Internacional, lo que cantó el Mano podría tener el color y la cadencia arrastrada del tema “Athesa”, tercero del disco de Los Ellos. “Quisimos contar algo primitivo, una canción de muerte en un ambiente nocturno, perturbador y paranoico”, explica el cantante. “Pensamos también en una batalla intergaláctica, desde un plano más infantil, lo cual fue muy liberador”, acota.

La mayoría de los artistas que participaron del homenaje, editado bajo el sello Concepto Cero, trataron de esquivar, al menos a la hora de componer, las connotaciones políticas que rodean al héroe. Pasarle de costado a ese aspecto debe haber sido una tarea difícil para las bandas, no sólo porque Oesterheld fue secuestrado y desaparecido por la dictadura militar en abril de 1977, a los 58 años, sino también porque la figura de El Eternauta se utilizó, el 14 de septiembre de 2010, en un acto multitudinario en el que participó Néstor Kirchner, para dar vida al “Nestornauta”. “Somos conscientes de que cualquier obra que homenajea a El Eternauta es política, y de hecho estamos presentando el disco un 24 de marzo, pero quisimos plantear este trabajo como una reunión de artistas totalmente independientes y no alineados con un partido; además, venimos gestando este proyecto desde bastante antes de que se comparara a Juan Salvo con Néstor Kirchner”, aclara Nicolás Madoery, director de Concepto Cero y codirector de esta iniciativa junto a Matías Olmedo. Ambos tocan en bandas oriundas de la ciudad de La Plata: Nicolás, en Brahmán Cero, y Matías, en Casimiro Roble.

Como músicos, tenían muy claro qué bandas se podían aproximar al sonido que querían. “A la hora de buscar a los artistas pensamos primero en nuestro círculo más cercano, que orbitan por La Plata y Buenos Aires, y tratamos de vislumbrar cuáles podían tener propuestas que se aproximaran al carácter épico de la obra”, cuenta Madoery. Cuarenta bandas se mostraron interesadas en participar. De todas ellas quedaron 18, cuyas canciones ya se pueden escuchar y descargar en forma gratuita en el sitio http://losellos.bandcamp.com. También hoy en Niceto se podrán ver ampliadas las 11 tapas intercambiables del disco y se proyectarán los contenidos del documental que registró todo el proceso de grabación (estará listo a mitad de año).

Los responsables de las ilustraciones del CD son: Acampante, Antonio Gagliano, Corina Arrieta, Dr. Alderete, Emmanuel Orezzo, Freshcore, Marcos Moreno, Marina Fages, Pacheco, Tormenta y Valentino Tettamanti, y los fotógrafos Cata Moncal y Francisco R. Laxague. Sumado a esto se podrá ver la instalación interactiva de Los Amigos de la Imagen, mientras que la puesta en escena del show estará a cargo de Colectivo Toranzo.

En el caso de Brahmán Cero, con su tema “El tiempo ha borrado”, Madoery comenta que se inspiraron en la idea de perder la noción de tiempo, en la sensación de estar viajando por distintos mundos y sitios temporales. Ese clima se mantiene a lo largo de todo el disco, como si lo que se transmitiera fuese la sensación de estar flotando indefinidamente, en la misma prisión infinita del pobre Juan Salvo. A Shaman Herrera, cantautor de Shaman y Los Hombres en Llamas, lo cautivó el aspecto guerrero de la historieta. La canción que escribieron tiene forma de estampida, de marcha bélica, de ejército desmantelado. Cascarudos, gurbos, hombres-robot, manos, humanos: todos luchando en la batalla campal de la cancha de River y, de fondo, por los parlantes del estadio, ese himno heroico de causas perdidas que se llama “Son Nuestros”.

Tal vez la canción más power del disco sea la de Perrodiablo, con “La guerra psicológica”. Doma, cantante del grupo, se imaginó el momento en que la nieve empieza a destruir todo, ese contacto inocente de los hombres con los copos que termina en la aniquilación. “Para nosotros, El Eternauta no deja de ser la batalla de un tipo luchando por la supervivencia de su especie, en un mundo que se terminó tal como lo conocían”, evoca. Y Kubilai Medina, cantante de Mostruo! –la cuarta banda que tocará esta noche en Niceto–, recuerda que, cuando empezó a nevar aquel 9 de julio de 2007 estaban en pleno ensayo. “Salimos de la sala y no lo podíamos creer; yo nunca había visto nevar”, afirma. Esa imagen, asociada a la historieta, y la escena en que Salvo y sus amigos quedan atrapados en el subte fueron las que más les sirvieron para armar el tema “Nunca”, del que se puede descargar una versión extendida que dura más de diez minutos.

Juan Salvo puede quedarse tranquilo. Aunque esté atrapado entre mil mundos, ahora tiene su propio disco eterno. Lo que sí se sabe es que a Los Ellos, representantes del odio cósmico, todo este asunto del homenaje no les está gustando ni medio.