Miércoles, 7 de septiembre de 2016 | Hoy
MUSICA › ARRANCA EL CICLO PURO ROCKANDROLL EN EL TEATRO ROMA
En el renovado teatro de Avellaneda, Rodolfo García es el encargado de programar fechas con pioneros del rock argentino como Alejandro Medina, Héctor Starc, Don Vilanova y Alambre González cruzados con bandas nuevas de la ciudad.
Por Cristian Vitale
La idea es simple pero valiosa: hacer coexistir bajo un mismo techo y una misma noche a varios de los músicos que estuvieron en las primeras horas del rock argentino, con otros tantos entre los emergentes. Tender puentes entre generaciones, dicho de otro modo. Pocas personas podrían “curar” un ciclo así como Rodolfo García, una especie de enlazador de mundos, sueños y épocas. De ahí que los responsables de cultura de la municipalidad de Avellaneda hayan dado con la persona indicada. “La idea básica era juntar músicos de diferentes generaciones. Que haya un grupo de cierre relacionado con los que generaron el rock argentino y un grupo de apertura de los nuevos. En realidad, el proyecto había empezado con apoyo del Ministerio de Cultura de la Nación. Después, en el verano, eso se interrumpió y lo retomó el intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi, porque estaba interesado en que continúe”, introduce este hombre de mil batallas culturales, sobre el ciclo Puro RockandRoll, que comenzará este mañana a las 20, en el Teatro Roma (Sarmiento 109), y se extenderá hasta el último jueves del mes. Alejandro Medina, pionero si los hay, tendrá la primera palabra con su Medinight Band y Héctor Starc la última del mes –porque el ciclo continúa hasta noviembre– junto a su banda Los Repartidores.
“A mediados de mes van a estar Alambre González, Don Vilanova y las ex Blacanblus Cristina Dall y Viviana Scaliza. Es interesante lo de las bandas nuevas, porque son todas de Avellaneda y están muy bien organizadas con la Unión de Músicos de Avellaneda; por lo tanto, la curaduría la hace directamente la municipalidad. Se trata de mostrar las dos puntas: los grupos de abajo que quieren hacer conocer lo suyo, y los grupos históricos que, como digo siempre, están recontra activos. No sólo se dedican a recrear los temas de antaño sino que siguen grabando, tocando y moviéndose. Y también nos interesa que haya un contacto en el teatro el día de la función, que compartan pruebas de sonido”, dice García, firme en la misión de seguir generando puentes entre generaciones, en este caso entre los nombrados, y Pobre Morales (jueves 8); H y los Invisibles (jueves 15); Tocados por la Noche (22) y Gamal (29). “Todo lo que podamos apoyar en este sentido es bienvenido, porque no existen muchas posibilidades de que los grupos se muestren, cuando en verdad hay muchas y buenas bandas. En Avellaneda también está la Casa de la Cultura, donde han hecho un estudio de grabación que ponen a disposición de las bandas nuevas, para que graben sus demos sin pagar. Hay un montón de movidas coherentes con lo que estamos haciendo… Voy a los conciertos, y noto que los pibes están contentos”, sostiene García, quien conectó con Cultura Avellaneda cuando tocó la batería en un homenaje a Claudio Gabis que se hizo en plaza Mitre.
“Se sabe que el sur y el oeste son zonas calientes para el rock and roll. Cuando estaba en el Ministerio, propuse hacer un ciclo como éste, en el que la municipalidad ponga lugar, técnica y sonido, y el ministerio lo suyo”, insiste el exbaterista de Almendra, Aquelarre y Tantor, que sufrió el cimbronazo político de diciembre desde adentro. “Hoy solo puedo opinar como un simple ciudadano y lo que veo es que hay una actividad artística muy por debajo. No veo que las cosas funcionen como en la gestión anterior. Igual, no estoy muy empapado con información exhaustiva, lo juzgo por lo que veo desde afuera y como un tipo que siempre ha defendido la gestión estatal en la cultura”, dice García, que fue Director Nacional de Artes cuando la que estaba al frente del ministerio era Teresa Parodi. “Me parece que es muy importante la intervención del Estado en la cultura y no para competir con los privados sino todo lo contrario. En este sentido, creo que hace falta mucha más actividad”, enfatiza “Rodo”, que se retrotrae a los momentos en los que tuvo la misión de conectar cultura y Estado.
“Primero, quiero decir que me sorprendió cuando me convocó Teresa. Pensé que íbamos a hablar de otras cosas, pero me ofreció esa dirección tan grande y medio que me asuste”, se ríe el músico, que estuvo un año y medio al frente de tal área. “Pero acepté el desafío porque me lo ofreció ella, con quien había trabajado en la Dirección de Música de la ciudad y en el Ecunhi. Fue una experiencia corta, en la que tratamos de hacer lo máximo que pudimos, y creo que estuvo bien, porque continuamos con proyectos anteriores, pero también agregamos programas, no sólo en Buenos Aires sino también en las provincias. Programas de promoción del tango, del folklore, de nuestra música, a través de charlas, talleres, conciertos... Se hizo mucho en poco tiempo. Igual, era algo que sabíamos que podía ocurrir, y por eso hubo que ponerse las pilas rápido y hacer. El hecho de que lo que era una secretaría de cultura haya pasado a ser un ministerio es un dato no menor. Y lo mismo pasó con el área de ciencia y técnica… ojalá se mantenga”, desea García, que también está colaborando con el Centro Cultural Padre Mugica, de Banfield. “Y además, quiero empezar a tocar con más frecuencia”, concluye el músico que, dicho sea de paso, ganó el Gardel de Oro con el disco póstumo de Luis Alberto Spinetta: Los Amigo.
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