Es una manera contundente de cerrar la conmemoración del treinta aniversario del golpe de Estado perpetrado en marzo de 1976: a partir de hoy, el Centro Cultural de la Cooperación (Av. Corrientes 1543) expondrá los collages que León Ferrari realizó para ilustrar los fascículos del libro Nunca Más, que publicó desde el año pasado Página/12. Recortes periodísticos, fotos, obras de artistas del pasado, iconografía cristiana, titulares de diarios y textos diversos son algunas de los elementos que unió el artista para reflejar los crímenes cometidos por la dictadura.

El 20 de septiembre de 1984, la Comisión Nacional sobre la Desaparición de las Personas (Conadep) entregó al entonces presidente Raúl Alfonsín el informe histórico donde se dejaba constancia de los sucesos ocurridos durante la última dictadura militar. Once años después, en 1995, el Concejo Deliberante de la Ciudad de Buenos Aires declaró obligatoria la lectura en las escuelas del Nunca Más, el libro que compendiaba esos informes. Página/12 lo editó en conjunto con la editorial Eudeba, acompañado por una carpeta de láminas numeradas y firmadas realizadas por Ferrari para ilustrar las portadas de la reedición a color del libro de ese año. El Nunca Más, desde su primera edición, se constituyó como el documento que mostró a quien quisiera enterarse las experiencias sufridas durante el genocidio ordenado por el autodenominado Proceso de Reorganización Nacional. La exposición de esta carpeta ilustrada comenzó su recorrido en marzo de 2006, en el Centro Cultural Municipal de Río Turbio, la población continental más austral de la Argentina: la muestra del CCC sirve para cerrar el periplo.

Las obras de Ferrari dan la posibilidad de acercarse a los sucesos contados en el histórico informe de la Conadep desde un lugar diferente al de los textos. Dibujos del siglo XIX, el infierno de La divina comedia, grabados de Gustave Doré o escenas del juicio final se ven mezcladas por el artista para mostrar las oscuras conexiones entre la represión religiosa y la política. El impacto se completa con testimonios incluidos en las obras, que terminan articulando el mensaje buscado por el artista. Las creaciones de León Ferrari dan cuenta de las diferentes modalidades de construcción de obra: metáforas, desvíos, parodias, ironías, conforman un mapa que Ferrari logra a través de su cut and paste hiperdesarrollado. No es un improvisado de la técnica, nacido en 1920, realizó sus primeros collages en 1959, cuatro años después de haber iniciado su producción artística. Los trabajos que llegan a exponerse hoy son producto del purismo de este estilo con el que logró cautivar a numerosos espectadores. Es así como las obras se transformaron en la ilustración obligada al leer las páginas de la obra que plasma el eterno deseo del “nunca más” de Ferrari y la sociedad argentina.

El artista de 86 años siempre ha querido plasmar en sus obras sus pensamientos, buscando provocar reacciones a quien las observe. Muchas veces atosigado por las repercusiones de sus trabajos, Ferrari ha dejado en claro que prefiere quedarse afuera de la discusión acerca de qué es arte o no. En las producciones del artista, dictadura, tortura, religión e Iglesia se mezclan para llevar al espectador a un clima especial. “Entre las singularidades características de la Biblia se cuenta la vecindad en sus páginas de la bondad y la maldad”, escribió Ferrari en una contratapa para este diario. “Es así que derechas e izquierdas cristianas pueden elegir entre ‘ama a tu prójimo como a ti mismo’ o amenazar al prójimo con el fuego eterno; bendecir a los enemigos o destruir sus templos y convertirlos en letrinas.”

Informe: Suyay Benedetti.