DISCOS
Lanzamientos
7-GRANDES ÉXITOS
Max Capote Ultrapop
“Si usted es una mujer actual y sofisticada necesita el nuevo gran éxito de Max Capote”, dice el librillo. Y sí, la orquesta que “corta, ralla, pela y tritura todo tipo de frutas y verduras” no está muy bien. Flotando entre la psicodelia setentista, la ironía feroz de Necrofilia, el espíritu fiestero de Noches pochas y baladas de amor cobarde como Vos sabés, los uruguayos liderados por Fabián Acosta entregan un disco debut para prestarle la oreja, dejarse llevar y terminar canturreando sin culpa algo tan extraño como Me gusta el Capitán Spock. E. F.
9-BULLET IN A BIBLE
Green Day Warner
Fueron, sin dudas, “la” banda estadounidense de 2005. Y esta es una de esas ofertas difíciles de rechazar: Bullet in a bible refleja la gira de Green Day en CD y DVD, con abundante material detrás de escena, entrevistas con los músicos y una colección de canciones para poner a todo gas, como Longview, Basket case, Holiday, el hit Boulevard of broken dreams, American idiot y la suite Jesus of Suburbia. Billie Joe, Mike Dirnt y Tré Cool en su mejor forma, demostrando que se puede ser bien punk y perdurar en el tiempo. E. F.
8-SOLID GOLD HITS
Beastie Boys EMI
A falta de disco nuevo (To the five boroughs apareció el año pasado, y los BB suelen tomarse su tiempo entre disco y disco), nunca viene mal una recopileta de los Chicos Bestia. A diferencia del doble The sounds of science editado en 1999, estos “hits de oro sólido” se concentran sólo en los momentos más salvajes del trío, de los inolvidables No sleep till Brooklyn y Fight for your right a Ch-check it out, pasando por Hey ladies, Intergalactic, Sabotage y el Body movin’ remixado por Fatboy Slim. Pogo en el living. E. F.
8-THE MAGIC NUMBERS.
The magic numbers. EMI
Los hermanos Romeo y Michelle Stodart y Sean y Angela Gannon son el centro de atención de periodistas y público ingleses, que los ven venir como una de esas bandas que dejarán marca. No les falta razón: su disco debut, editado en la Argentina sobre el filo de 2005, abunda en delicadezas instrumentales y se apoya no sólo en la luminosidad de sus melodías (chequear Mornings eleven, Love me like you o la deliciosa Forever lost) o momentos melancólicos como I see you, you see me y This Love, sino también en un trabajo de voces encantador. E. F.