La renuncia a la jefatura de Gabinete de Alberto Fernández tuvo su inmediata consecuencia en Canal 7. Tal como adelantó ayer PáginaI12, Rosario Lufrano presentó el miércoles a la tarde su renuncia a la dirección ejecutiva de la emisora estatal, tras dos años y dos meses de gestión. “Mi dimisión al cargo tiene que ver con que me parecía que era lo más coherente tras la renuncia de quien en su momento me pidió que le presentara un proyecto para el canal y quien lo aceptó”, le explicó Lufrano a PáginaI12. A su vez, la periodista también consideró que “humildemente había cumplido con las metas” que se había impuesto para su gestión. “Me dieron un canal herido de muerte y en poco más de dos años logramos ponerlo de pie, reequipándolo y conformando una programación reconocida de servicios, informativa y cultural”, puntualizó. Junto a Lufrano, también renunciaron el gerente de programación, Martín Bonavetti, y el gerente de deportes, Carlos Asna-ghi. El cineasta Tristán Bauer, actual director artístico de Canal Encuentro, es el principal candidato del Gobierno para ocupar el puesto vacante.

El alejamiento de Fernández había encendido las luces de alarma respecto de la posición que tomarían algunos funcionarios elegidos por el ahora ex jefe de Gabinete. En ese contexto, Lufrano consideró que era el momento de dar un paso al costado de su gestión en el canal público. “Hacía unos meses que venía pensando internamente que mi gestión estaba llegando a su fin, que había cumplido una etapa. Incluso, ya había dejado entrever en otros ámbitos que era el momento de pensar un cambio dentro de la dirección de la emisora. Aunque pensaba irme después de los Juegos Olímpicos, porque la transmisión de diez horas diarias de las actividades era otro logro nuestro, a veces es la realidad la que impone los tiempos.”

La periodista elevó su renuncia a la máxima autoridad del directorio del Sistema Nacional de Medios Públicos (SNMP), Gustavo López. La carta de renuncia fundamenta el alejamiento “en virtud de haber alcanzado, en su totalidad, las metas propuestas al designarme”, a la vez que subraya que durante su gestión “fue posible construir –a partir del concepto de televisión pública– contenidos plurales que dieron espacio a la diversidad cultural de nuestro país, conformando un lugar para todos”. La renuncia de Lufrano fue aceptada ayer, no así la de sus colaboradores, debido a que desde el Gobierno esperan que Asnaghi continúe en el cargo, al menos hasta después de las Olimpíadas. En el caso de Bonavetti, su renuncia dependerá de la persona que asuma la dirección ejecutiva.

Más allá de los motivos formales y públicos de la renuncia, lo cierto es que también empujó a Lufrano a tomar esta decisión el hecho de que le habían llegado a sus oídos los contactos que algunos funcionarios del gobierno nacional habían tenido con Bauer y que le habían transmitido el interés de que se hiciera cargo del canal. La lograda programación que el realizador de Iluminados por el fuego conformó en Canal Encuentro fue aplaudida desde el primer momento por la presidenta Cristina Kirchner y por José Albistur, el secretario de Medios, de quien depende el Sistema Nacional de Medios Públicos. De hecho, PáginaI12 supo que ayer por la tarde la Presidenta le ofreció formalmente el cargo a Bauer, quien pidió un tiempo para contestar. Antes de la charla, Bauer le dijo a este cronista que “en caso de que me ofrezcan la dirección del canal tendría que pensar muy bien si aceptar o no, porque se trata de un cargo sumamente importante”.

La renuncia de Lufrano es al puesto que ocupaba como directora ejecutiva del canal, el cual ejercía ad honorem, debido a que cobraba un sueldo como conductora del noticiero central de Visión 7, rol que aún no decidió si continuará ejerciendo. En este punto es bueno aclarar que las decisiones de la saliente directora se limitaban exclusivamente a la programación artística (ficción y entretenimiento), ya que por incompatibilidad de funciones la Oficina Anticorrupción le restringió sus funciones respecto de los programas periodísticos y noticieros que responden a la gerencia de noticias (actualmente a cargo del periodista Felipe Yapur). “Me voy a tomar unos días para ver si continúo en el noticiero, una función que me encanta ejercer porque soy fundamentalmente periodista, pero que dependerá de qué es lo que quiero hacer en esta nueva etapa”, comentó Lufrano.

Bajo su gestión, Canal 7 logró conformar una programación heterogénea, que contó entre sus principales logros el haberle devuelto a la pantalla estatal la producción de ficción (Cuentos de Fontanarrosa, Cara a cara, Tinta negra), recuperar la transmisión en vivo y en directo de un partido por fecha de fútbol argentino de Primera División y de haber obtenido los derechos de emisión de diferentes eventos deportivos en los que competía algún argentino, como los partidos finales de la NBA o de la Champions League, entre otros. Además, su gestión marcó el regreso al 7 de diferentes actrices y actores de reconocida trayectoria, a la vez que la participación de personalidades de la cultura nacional.

“Lo que más rescato es que logramos imponer el concepto de televisión pública en la gente, reforzando la idea de que un canal público no es una señal gubernamental, sino que es una pantalla para todos los argentinos. Paralelamente a ese concepto, y para que su aplicación tenga validez, pudimos instalar a lo largo de todo el país once repetidoras de las dieciocho previstas, para que el canal de todos pueda ser visto por todos los habitantes del país”, destacó la periodista.

Aunque no quiso dar precisiones sobre el reemplazante, el presidente del directorio del SNMP le dijo a PáginaI12 que “la persona que asuma la dirección ejecutiva del canal tendrá que seguir las pautas que fijó el sistema, que tienen que ver con la calidad, la pluralidad y la diversidad cultural, el fortalecimiento de la democracia y la construcción de ciudadanía”. López señaló que “la gestión de Lufrano cumplió con estas normas, aunque siempre hay cosas para opinar y su aplicación es plausible de ser perfectible”.