El primer documental argentino sobre la guerra de Malvinas lo realizó el cineasta Jorge Denti en el exilio mexicano: Malvinas. Historia de traiciones vio la luz al año de haber terminado el conflicto bélico de 1982. El film de Denti circuló de manera casi marginal durante el gobierno de Raúl Alfonsín. Distinto fue el caso de lo sucedido en América latina y en Europa, donde tuvo un fuerte impacto –y apoyo– y se emitió públicamente en diversas oportunidades. Por eso, como Malvinas. Historia de traiciones se va a presentar en la pantalla del Canal Encuentro hoy a las 22, en carácter de estreno, Denti respalda la nueva realidad de la televisión pública argentina: “Los tiempos cambiaron y ésta es una democracia diferente porque existe la libertad de opinión. Y para mí es importante que se pase, dado que es una película independiente que no tuvo apoyo”, expresa el cineasta en diálogo con Página/12, recién llegado de la tierra azteca para ultimar los detalles de la emisión.

La guerra de Malvinas, según lo experimentó Denti, dividió a la comunidad argentina en el exterior. “Hubo ciertos sectores del exilio que sí tomaron la reivindicación de Malvinas, pero acompañando un poco el evento de la intervención militar, y otros que no creíamos que ése era el camino y teníamos claro que los militares estaban buscando solucionar a través de la intervención militar en Malvinas los problemas internos que tenían: políticos, económicos y de imagen, después del desastre que habían hecho en los seis años de dictadura. Entonces, no creíamos que era ‘La gesta de Malvinas’”, afirma Denti.

Durante aquella época le surgió la idea de hacer una película que reflejara las causas políticas, sociales y económicas de la guerra de Malvinas, pero con una particularidad: analizada por integrantes de diversos sectores tanto del lado argentino como del inglés. Denti lo conversó con el historiador Gregorio Selser (“una de las personas que más me animó a hacer esta película”, confiesa) y, entonces, intercambiaron diversas ideas. Denti cuenta cómo era la suya: “Yo quería hacer un documental en el que hablaran los pueblos; es decir, qué sentía el pueblo argentino en sus diferentes manifestaciones, como los ex combatientes de Malvinas, que fueron utilizados para la guerra, historiadores, obreros, intelectuales, gente ligada a los derechos a los humanos, y lo mismo en Inglaterra”, confiesa.

Hasta qué punto podía llegar a interesar a los ingleses un documental hecho por un argentino sobre la guerra de Malvinas es algo difícil de entender, que sólo se comprende con la explicación del propio cineasta. Denti estaba en pleno proceso de preparación del documental cuando se encontró con el crítico de cine inglés Michael Chanan, después de haberse conocido en festivales de cine en Europa. El distribuidor del proyecto de Denti, Jorge Sánchez, le comentó a Chanan la idea que tenía el cineasta. Chanan lo contactó entonces con el recientemente nacido Channel Four de Londres. Y finalmente llegó a un acuerdo con esa señal televisiva y parte de Malvinas. Historia de traiciones se rodó en Londres. “La televisión inglesa es también una televisión cerrada, de las grandes corporaciones, pero este canal era una experiencia similar a la televisión pública argentina actual”, explica Denti.

Así y todo no resultó sencillo. “Los conservadores se opusieron a la difusión de la película y el Daily News tituló: ‘Paren la película del argentino’. Y pedía al Parlamento que prohibiera la pasada de la película. Pero en Inglaterra no pueden hacer eso y se pasó”, recuerda Denti. “Tuvo una expectativa y ayudó mucho el Channel Four a posicionarla.” El realizador todavía tiene fresco en su memoria que recibió alrededor de setecientas cartas con diferentes reacciones de los espectadores ingleses que vieron el documental. “Unas eran a favor, otras decían que había que fusilarme. Pero se pasó y mucha gente apoyó la película y ese tipo de cine.”

Malvinas. Historia de traiciones se filmó en ambos países. Respecto de la decisión de rodar en Gran Bretaña, Denti expresa que le interesaba “lo que pensaba el pueblo inglés y no la Thatcher”. Y lo argumenta así: “Lo de la Thatcher lo sabíamos. Pero detrás de ella había un pueblo que también fue manipulado. Y que tenía sus conflictos, porque Thatcher llegó a la guerra para evitar unos conflictos, internos, como tenía la dictadura argentina, aunque de otras formas, claro. Pero eran sociales: había descontento, problemas de de-socupación en Inglaterra, fábricas cerradas. Había un caldo diferente porque la situación era diferente”. El director sostiene que las expresiones de los obreros eran muy respetuosas de los argentinos y de la situación del pueblo argentino. Un pensamiento diferente del de los militares ingleses o el gobierno de Inglaterra. “El pueblo era otra cosa”, considera.

La principal causa de la guerra de Malvinas fue, según Denti –y como piensan muchos argentinos–, la necesidad de la dictadura de encontrar legimitidad social. “El pueblo argentino estaba harto del manejo que había hecho la dictadura de esa patria inventada que hicieron. Y después, el conflicto social que había dejado la represión, los de-saparecidos, los muertos y el fracaso económico de la política neoliberal. Y hasta el problema de empleo que tuvo la clase trabajadora.” En ese sentido, el equipo de Denti tomó contacto con diversos sectores que estaban luchando por reivindicaciones en las fábricas y que brindaron testimonio. También lo hicieron los dirigentes de la CGT de entonces, habitantes de las villas y de clase media. “Es decir, un muestreo de la sociedad argentina”, describe el mentor del proyecto.

Como otra de las hipótesis del documental gira alrededor de la ambición colonialista de Gran Bretaña, Denti también propone un análisis de las posiciones de las dos partes a través de historiadores, periodistas y escritores. “Se ve la opinión de los ingleses y la de los argentinos y latinoamericanos. Gran parte de los ingleses creen que las islas son argentinas, que no tienen por qué ser inglesas porque es un acto colonial que se viene arrastrando desde hace mucho. Pero también existe la parte nacionalista e imperial inglesa”, ejemplifica.

Malvinas. Historia de traiciones también recupera algunas de las imágenes del especial que realizó su compañero del grupo Cine de la Base, Raymundo Gleyzer, cuando en los años ’60 viajó a las islas y habló con sus habitantes para un especial de Telenoche. “Tuve la suerte de ver el trabajo de Raymundo y fue el mejor trabajo que yo he visto sobre las Malvinas.”